La minera canadiense First Quantum Minerals, que perdió el derecho a explotar su mina de cobre en Panamá el año pasado tras las protestas de grupos ecologistas y un fallo judicial que consideró nulo su contrato, está tratando de acelerar sus proyectos de cobre en Perú, dijo el miércoles un ejecutivo de la empresa.

First Quantum, uno de los tres mayores productores mundiales de cobre, controla en Perú el proyecto La Granja, valorado en al menos 2.500 millones de dólares, y el proyecto Haquira, valorado en 1.860 millones de dólares.

"Son proyectos que necesitan acelerarse", dijo el director de desarrollo de proyectos de la minera, Steven Lewis, durante una intervención en un foro minero en Lima.

La Granja, donde la también minera Río Tinto es socia minoritaria, es un proyecto con una vida útil de 40 años y una producción prevista de 500.000 toneladas métricas al año, según datos del Gobierno. Lewis, de First Quantum, dijo que tiene uno de los mayores yacimientos de cobre sin explotar del mundo.

Mientras tanto, el proyecto Haquira, propiedad al 100% de First Quantum en la región de Apurímac, se encuentra en la fase de "prefactibilidad". Podría alcanzar una producción anual de 200.000 toneladas una vez a plena capacidad.

"Estamos muy ocupados construyendo relaciones más positivas con las comunidades (en Haquira) para permitir que salga a la luz", dijo Lewis, que no ofreció un calendario para la construcción de ambas minas en el país sudamericano.

La empresa cambió su enfoque hacia Perú después de que el gobierno de Panamá decidiera el año pasado anular el contrato de First Quantum para explotar allí la mina Cobre Panamá, que representó alrededor del 40% de los ingresos de First Quantum el año pasado.

"Ahora estamos trabajando con el gobierno de Panamá para garantizar la estabilidad medioambiental (del proyecto), la integridad de los activos de cobre y, lo que es más importante, la seguridad de nuestros empleados", dijo Lewis.

El gobierno saliente del presidente panameño Laurentino Cortizo ordenó el cierre de la mina, que actualmente se encuentra en modo de mantenimiento mientras se inicia el proceso formal de clausura.

La administración entrante del presidente electo José Raúl Mulino, que tomará posesión el 1 de julio, se encargará de establecer las directrices del proceso. (Reportaje de Marco Aquino; Edición de David Gregorio)