DUISBURGO (dpa-AFX) - La caída de los precios del acero y los ajustes de valor llevaron a la siderúrgica Klockner & Co a registrar números rojos el año pasado. No obstante, se pagará un dividendo a los accionistas. La dirección, en torno al consejero delegado Guido Kerkhoff, se muestra más confiada para el nuevo año: Klockner espera una recuperación de la demanda, que también debería reflejarse en las cifras. Esto fue bien recibido por el mercado: La acción, que cotiza en el segmento de pequeña capitalización SDax, ganó más de un 5% por la mañana.

El resultado final para 2023 fue una pérdida de 190 millones de euros, según anunció la empresa el miércoles en Duisburgo. El año anterior, la empresa había registrado un beneficio de 259 millones de euros. Las minusvalías se debieron a la reciente venta de las cuatro empresas nacionales de Francia, Reino Unido, Países Bajos y Bélgica. Ajustado por este motivo, el resultado del Grupo fue negativo en 0,3 millones de euros. No obstante, Klockner tiene la intención de pagar un dividendo de 0,20 euros por acción, la mitad que el año anterior. Klockner justifica el pago por las entradas de tesorería claramente positivas. Además, los muy sólidos resultados del ejercicio anterior sólo se distribuyeron parcialmente.

Con la venta de las cuatro empresas nacionales, Klockner pretende concentrarse en su mayor mercado, Norteamérica, así como en sus actividades en Alemania, Austria y Suiza. En el futuro, la empresa se centrará en mayor medida en el negocio de transformación y trabajo del metal. Según Klockner, esta área de negocio se caracteriza por contratos a largo plazo y un alto nivel de especialización de los clientes. Además, la demanda es más estable y la rentabilidad es mayor.

La cifra de negocios pasó de 8.300 millones a algo menos de 7.000 millones de euros en 2023. Ajustado por efectos especiales, el beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (EBITDA) cayó de 355 millones a 190 millones de euros, en línea con la previsión más reciente de Klockner. La empresa ya había rebajado sus perspectivas el año pasado.

Para el año en curso, la empresa espera una normalización de las condiciones generales y una ralentización de la dinámica inflacionista. Se espera que la demanda en los principales mercados de ventas de Europa y Norteamérica aumente significativamente, y con ella el volumen de negocios y de ventas. Klockner también prevé un aumento significativo de los beneficios.

La recuperación debería ser visible ya en el primer trimestre: la empresa prevé un resultado operativo ajustado de 30 a 70 millones de euros. Esto representa una mejora significativa respecto al trimestre anterior, en el que se contabilizaron 17 millones de euros./nas/men/mis