Un antiguo socio de Freshfields fue condenado el martes a tres años y seis meses por su papel en una trama de fraude fiscal alemán de miles de millones de euros que ha atrapado a decenas de bancos nacionales y mundiales y a cientos de particulares.

Los fiscales acusaron al abogado fiscalista, Ulf Johannemann, de ayudar a un cliente a evadir impuestos y presionaron para que se le impusiera una pena de 5,5 años. (Reportaje de Tom Sims Edición de Madeline Chambers)