Estados Unidos debería ampliar los beneficios fiscales de los vehículos eléctricos a Vietnam si quiere fomentar una inversión histórica del país en la fabricación de productos estadounidenses, declaró el jefe del principal grupo de presión empresarial estadounidense para el Sudeste Asiático.

Las normas incluidas en la Ley estadounidense de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés) destinadas a reducir la dependencia estadounidense de las cadenas chinas de suministro de baterías para vehículos eléctricos actualmente sólo benefician a los países que tienen acuerdos de libre comercio con Washington, una lista que excluye a Vietnam.

El fabricante de automóviles vietnamita VinFast inició la semana pasada la construcción de una planta de 4.000 millones de dólares para producir VE en Carolina del Norte destinados al mercado estadounidense, pero podría tener dificultades para competir sin la desgravación fiscal, dijo Ted Osius, ex embajador de EE.UU. en Vietnam que dirige el Consejo Empresarial EE.UU.-ASEAN, un grupo de presión.

VinFast respondió al llamamiento del presidente Joe Biden para que los vehículos eléctricos se fabriquen en Estados Unidos, dijo Osius a Reuters en una entrevista el jueves: "Ahora tendrán algunas preguntas. Querrán formar parte de la cadena de suministro de vehículos eléctricos y no querrán que se les discrimine en favor de otros productores de vehículos eléctricos."

Por el momento, no había "ningún camino claro" para que Vietnam obtuviera los beneficios fiscales, pero el hecho de que VinFast estuviera avanzando en la construcción muestra "una cierta confianza en que esto se va a solucionar, y yo comparto esa confianza", dijo Osius.

Que la administración de Biden pueda encontrar una solución para el fabricante de automóviles vietnamita podría ser una prueba de hasta dónde pueden extenderse los beneficios del IRA.

La IRA concede una desgravación fiscal de 7.500 dólares a los VE comprados en Estados Unidos siempre que un porcentaje de los minerales críticos que entran en la fabricación de las baterías proceda de Estados Unidos o de un socio de libre comercio.

Estados Unidos firmó en marzo un acuerdo con Japón sobre minerales críticos que garantiza que los coches japoneses se beneficiarán de la desgravación fiscal. Ahora, tanto la UE como Gran Bretaña buscan lo mismo.

Biden dijo la semana pasada que podría reunirse con el líder de Vietnam en la cumbre del G20 que se celebrará en Nueva Delhi en septiembre, donde se espera que ambos acuerden medidas para profundizar en una relación que ha florecido en los últimos años en medio de la creciente tensión de Estados Unidos con China.

Osius dijo que Washington debería ampliar el beneficio fiscal a los signatarios del Marco Económico Indo-Pacífico (IPEF), una imitativa comercial en la que participan 14 países, entre ellos Vietnam y la cercana Indonesia, que posee vastas reservas de los minerales que se encuentran en las baterías.

La administración Biden lanzó el IPEF como parte de sus esfuerzos por intensificar el compromiso económico con Asia después de que el ex presidente Donald Trump se retirara de un pacto comercial panpacífico, pero carece de las disposiciones de acceso al mercado que desean los estados de la ASEAN. (Reportaje de David Brunnstrom y Simon Lewis; información adicional de David Shepardson; edición de Don Durfee y Diane Craft)