El repunte de los viajes aéreos es innegable, pero los operadores mantienen la cautela ante los trimestres venideros. Aunque la demanda de viajes de gama alta y de ocio es muy fuerte, los viajes de negocios no han vuelto a los volúmenes anteriores a la pandemia. Además, el sector sigue lastrado por los problemas de suministro, que podrían no resolverse en 5 años, si nos atenemos a las previsiones de Boeing. Marjan Rintel, consejera delegada de la compañía, que explicó que había paliado el problema recurriendo al arrendamiento de aviones, también comentó las dificultades que encontraron los pasajeros el verano pasado: "este año no habrá trastornos", dijo, "porque hemos contratado masivamente".
(MT Newswires)
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