El banco central mantuvo su tipo de referencia en el 4,75%, su nivel más alto desde finales de 2006. Había subido los tipos 10 veces seguidas en un agresivo ciclo de endurecimiento que ha llevado el tipo desde el 0,1% el pasado abril antes de hacer una pausa en julio y de nuevo en agosto y octubre.
La tasa de inflación se redujo al 3,7% en octubre desde el 3,8% de septiembre para mantenerse por encima de un rango objetivo anual del 1-3%.
Los funcionarios han advertido de que unos recortes bruscos de los tipos en estos momentos debilitarían el shekel y harían subir la inflación.
Los 14 economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que no habría cambios en los tipos. (Reportaje de Steven Scheer; Edición de Toby Chopra)