Se trata de la segunda moción de censura del año, tras la caída en febrero del gabinete del primer ministro Zdravko Krivokapic, que contaba con el apoyo de la Iglesia ortodoxa serbia.
"Estoy muy orgulloso de todo lo que hemos hecho en 100 días", dijo Abazovic tras la votación. "Seremos recordados como el gobierno que ha durado menos pero que ha tomado las decisiones más difíciles".
El presidente Milo Djukanovic tendrá que nombrar ahora a un nuevo primer ministro designado para formar un nuevo gobierno de la nación miembro de la OTAN que aspira a entrar en la Unión Europea. También existe la posibilidad de que se celebren unas elecciones anticipadas.
La política en el país adriático de apenas 625.000 habitantes ha estado marcada durante mucho tiempo por las divisiones entre los que se identifican como montenegrinos y los serbios prorrusos que se opusieron a la independencia de Montenegro de una antigua unión estatal con Serbia.
Tras un día de debate, la moción de censura, propuesta conjuntamente por el Partido Democrático de los Socialistas (DPS) del presidente Milo Djukanovic y algunos partidos de la coalición gobernante, recibió el respaldo de 50 de los 81 diputados del parlamento.
Abazovic firmó el acuerdo con la Iglesia este mes, a pesar de las críticas de los grupos de derechos y de los partidos políticos prooccidentales, que dijeron que otorgaba a la Iglesia demasiado poder en comparación con otras comunidades religiosas.
Insistió en que el pacto resolvería un problema interno de larga data y ayudaría a sanar las divisiones entre los partidos pro Unión Europea y los que apoyan lazos más fuertes con Serbia y Rusia.
Los grupos criminales que patrocinan a algunos partidos políticos estaban detrás de la moción de censura para impedir la campaña de su gobierno contra la corrupción, dijo Abazovic el viernes.
"Este país será gobernado o por criminales o por ciudadanos", dijo tras la votación. "Y lamento... que el crimen organizado en Montenegro siga utilizando sus tentáculos para regular las relaciones políticas".
