Es probable que la acumulación de suministros de estaño este año ejerza presión sobre los precios, pero la aceleración de la demanda del sector de la transición energética, incluidos los paneles solares y los vehículos eléctricos, debería sostener los precios en el futuro.

El estaño se utiliza en la soldadura de placas de circuitos para productos como teléfonos móviles y en coches eléctricos, y también en la fabricación de paneles solares. La soldadura representa actualmente cerca de la mitad del consumo mundial de estaño.

La atonía de la demanda, sobre todo de la industria de semiconductores, ha provocado excedentes en el mercado durante los dos últimos años. Y ello a pesar de la prohibición impuesta el pasado agosto a la extracción de estaño en la región Wa de Myanmar, que exporta a China, el principal productor de estaño refinado y también el mayor consumidor.

El estado de Wa autorizó la reanudación parcial de la minería a partir del 3 de enero "con la notable excepción de la zona minera de Man Maw, que representa casi toda la producción de estaño de la región autónoma", según la Asociación Internacional del Estaño.

Los precios del estaño en la Bolsa de Metales de Londres (LME) han bajado un 20% hasta situarse en torno a los 26.500 dólares la tonelada métrica, desde que en enero del año pasado alcanzara un máximo de seis meses de 32.680 dólares.

"Es posible que el mercado se relaje en 2024, sobre todo si llega más oferta de Myanmar", dijo la estratega de Bank of America Danica Averion.

"Frente a los vientos en contra a corto plazo, los fundamentos parecen sólidos a más largo plazo en la energía solar y los vehículos eléctricos".

Bank of America estima el excedente del mercado de estaño en 5.800 toneladas el año pasado y el consumo mundial en 360.400 toneladas.

Myanmar representó el 72% de las importaciones totales chinas de minerales y concentrados de estaño el año pasado, con más de 180.000 toneladas, frente a una cifra superior a las 187.000 toneladas o casi el 77% en 2022, según Trade Data Monitor (TDM).

El apoyo a corto plazo para los precios del estaño podría venir de Indonesia, segundo productor mundial de estaño refinado después de China.

"En los últimos años, hemos visto cómo las exportaciones indonesias de estaño se desplomaban en los primeros meses del año debido a la renovación de las licencias de exportación", señalaron los analistas de Citi en una nota de diciembre.

A más largo plazo, la inversión y las ventas de vehículos eléctricos y paneles solares harán que el consumo de estaño se acelere.

"La demanda de estaño del sector ecológico podría más que duplicarse de aquí a 2030, superando potencialmente las 70.000 toneladas anuales, lo que equivale a una quinta parte del consumo actual", afirmó Averion.

"Esto sugiere que los fundamentos se mantendrán fuertes y la atención se centrará en el lado de la oferta y en la medida en que los productores serán capaces de satisfacer esta demanda adicional".