Los precios europeos del gas alcanzaron máximos históricos el año pasado debido a la escasez de suministro y a la elevada demanda de las economías mundiales que se recuperan de la pandemia del COVID-19, lo que obligó a los gobiernos a desplegar subsidios y exenciones fiscales para evitar facturas elevadas.

Draghi, ex presidente del Banco Central Europeo, dijo en una conferencia de prensa que los líderes de la UE estaban debatiendo la cuestión, y añadió que entre las opciones estaba la de que grupos de países compraran gas juntos y acumularan reservas de gas de forma conjunta.

"El debate continúa, muy activamente, en el seno del Consejo Europeo", afirmó.

También repitió una sugerencia anterior de que las empresas que se han beneficiado del aumento de los precios deberían hacer frente a impuestos adicionales.

"Debería pedirse a quienes han obtenido enormes beneficios de esta subida del precio del gas que compartan estos beneficios con el resto de la sociedad", dijo Draghi.