El izquierdista Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) de López Obrador y sus aliados iban a ganar las elecciones a gobernador en los estados de Oaxaca, Quintana Roo, Hidalgo y Tamaulipas, según los recuentos preliminares de votos de las autoridades electorales.

Los candidatos de la oposición encabezaban los recuentos en el estado central de Aguascalientes y en Durango, en el norte, en línea con los resultados anticipados por los sondeos de opinión. Los seis estados que celebran elecciones comenzaron el domingo en manos de la oposición.

Asegurar cuatro de las seis gobernaciones daría a MORENA el control de 20 de las 32 administraciones regionales de México, y subrayaría el duradero atractivo electoral del presidente. Los gobernadores aliados con MORENA también dirigen otros dos estados.

Las encuestas han mostrado sistemáticamente que López Obrador es más popular que MORENA, el partido que fue vehículo de su campaña presidencial en 2018, cuando ganó por goleada.

Funcionarios cercanos al presidente esperan que tenga una influencia significativa sobre su potencial sucesor, y las victorias electorales deberían ayudarle a consolidar su poder.

Enfrentado a la pandemia del COVID-19, el presidente ha luchado por cumplir sus promesas de campaña de aumentar el crecimiento económico y reducir significativamente la violencia impulsada por las bandas. Sin embargo, su despliegue de programas de bienestar social ha apuntalado su popularidad.

Según la ley mexicana, los presidentes sólo pueden ejercer un único mandato de seis años. Está previsto que el sucesor de López Obrador sea elegido en junio de 2024. La alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y el ministro de Asuntos Exteriores, Marcelo Ebrard, se encuentran entre los favoritos para el puesto.

Los analistas políticos tienden a ver a Sheinbaum como más alineada ideológicamente con la base de López Obrador, y a Ebrard como más moderado, con mayor atractivo para los votantes de clase media.