Si la agencia hubiera accedido a declarar el problema como intrascendente, GM no habría estado obligada a notificar el problema a los clientes y a proporcionar una solución gratuita.
El fabricante de automóviles de Detroit argumentó que el problema no afectaba a la seguridad del vehículo y solicitó a la NHTSA en 2019 que declarara el problema intrascendente para los vehículos GMC Terrain de los años de modelo 2010 a 2017. GM dijo que el problema se ha corregido en las piezas de repuesto y no afecta a los vehículos de la generación actual.
La NHTSA dijo que en ciertas condiciones climáticas, como la nieve y la niebla, el problema de los faros podría causar "el deslumbramiento de otros automovilistas que conducen en la proximidad".
GM dijo el viernes que estaba al tanto del fallo de la agencia y que "revisará la decisión de la NHTSA y explorará los posibles pasos a seguir".
GM dijo a la NHTSA que sólo tenía conocimiento de "una única consulta de un cliente asociada a esta condición y que no tiene conocimiento de ningún choque o lesión". (Reportaje de David Shepardson; Edición de Cynthia Osterman)