Los ataques ayudaron a impulsar los precios del petróleo, que han subido casi un 4% en lo que va de año desde el 12 de marzo, cuando Ucrania empezó a atacar la infraestructura energética rusa. Un nuevo repunte de los precios de la gasolina en Estados Unidos debilitaría las calificaciones del presidente Joe Biden y minaría sus posibilidades de reelección. [O/R]

Tanto Rusia como Ucrania han utilizado aviones no tripulados para atacar infraestructuras críticas, instalaciones militares y concentraciones de tropas en su guerra de más de dos años, y Kiev ha atacado refinerías e instalaciones energéticas rusas en los últimos meses.