Según el documento de 58 páginas, el gobierno revisará el proceso de concesión de permisos con vistas a reducir el tiempo necesario para poner en marcha las minas evitando duplicidades y garantizar la consulta y el compromiso tempranos de los indígenas. No indicaba cuándo se completaría la revisión.
A las empresas se les ofrecerá ayuda para solicitar permisos y apoyo federal a través del Centro de Excelencia de Minerales Críticos, que ya está funcionando con un equipo de unas 15 personas, dijo una fuente gubernamental de alto nivel familiarizada con la estrategia.
Los minerales críticos son elementos clave en las baterías de los vehículos eléctricos, la electrónica y los paneles solares, y desempeñan un papel crucial en la transición hacia la economía verde. Aunque Canadá alberga algunos de los mayores yacimientos de minerales críticos, un proyecto minero puede tardar entre 5 y 25 años en ser operativo, según el documento.
Muchos en la industria minera han dicho que el proceso es demasiado lento y está frenando la inversión.
"Reconocemos que, aunque una reglamentación responsable es vital, los complejos procesos de reglamentación y concesión de permisos pueden obstaculizar la competitividad económica del sector y aumentar el riesgo de inversión para los proponentes", reza el documento.
A medida que el mundo se orienta hacia tecnologías más limpias para luchar contra el cambio climático, se prevé que su demanda se dispare.
China domina actualmente el mercado de los minerales críticos utilizados en las baterías de los vehículos eléctricos. Países como Estados Unidos, Canadá, Australia, India y Japón quieren desprenderse de su dependencia de regímenes autoritarios para obtener materiales de importancia estratégica, y Canadá firmó un plan de acción conjunto con Estados Unidos en 2020 para avanzar en la seguridad de las cadenas de suministro de minerales críticos.
La estrategia establece prioridades a lo largo de toda la cadena de valor de los minerales críticos, desde la exploración y la minería hasta el reciclaje de baterías viejas, y también cubre la necesidad de nuevas infraestructuras en rincones a menudo remotos del país.
Ottawa buscará una "armonización reglamentaria" con Estados Unidos en materia de minerales críticos, según reza el documento sin dar más detalles, como parte de la estrategia.
El gobierno del primer ministro Justin Trudeau también ha dicho que tratará de igualar las condiciones de las tecnologías limpias con Estados Unidos, que introdujo generosos incentivos a principios de este año en la Ley de Reducción de la Inflación.
Canadá ha firmado acuerdos similares de cooperación sobre minerales críticos con Japón y la Unión Europea.
La estrategia de Ottawa da prioridad al desarrollo del litio, el grafito, el níquel, el cobalto, el cobre y los elementos de tierras raras. Al mismo tiempo, Canadá ofrece un crédito fiscal del 30% para estimular la exploración de níquel, litio, cobalto, grafito, cobre, elementos de tierras raras, vanadio y uranio.
"Esta Estrategia, respaldada por casi 4.000 millones de dólares canadienses (2.950 millones de dólares estadounidenses) en el presupuesto de 2022, marca el rumbo para que Canadá se convierta en un proveedor mundial preferente de minerales críticos y de las tecnologías digitales limpias que permiten", escribió en el documento el ministro de Recursos Naturales, Jonathan Wilkinson.
Wilkinson dará una conferencia de prensa para anunciar la estrategia más tarde el viernes.
Canadá ordenó el mes pasado a tres empresas chinas que desinvirtieran en empresas canadienses de minerales críticos tras una revisión de seguridad nacional. El jueves, Canadá dijo que reforzaría las normas en torno a la inversión extranjera, en el sector de los minerales críticos y en otros.
(1 dólar = 1,3579 dólares canadienses)
