Junto con una racha continua de subidas de los tipos de interés, espera que el llamado endurecimiento cuantitativo, o QT, aumente los costes de los préstamos y, por tanto, frene la demanda de bienes y servicios en los 19 países que utilizan el euro.

El cambio de política será histórico, después de que el BCE pasara casi una década haciendo exactamente lo contrario a través de múltiples programas de estímulo que mantuvieron la economía de la zona del euro a flote a través de crisis sucesivas.

También supone un reto para los gobiernos que han confiado en el BCE como principal prestamista durante años, especialmente en el endeudado sur del bloque.

El BCE expondrá los "principios clave" del programa QT el 15 de diciembre, y se espera que se ponga en marcha en los primeros meses de 2023.

Estas son las principales preguntas que se hacen los inversores sobre los planes del BCE.

¿QUÉ ES EL QT Y CÓMO SE SUPONE QUE FUNCIONA?

A nivel general, se supone que el endurecimiento cuantitativo es un reflejo de las políticas de flexibilización cuantitativa (QE) que han dominado la última década.

Con la QE, el BCE redujo los costes de los préstamos comprando bonos del Estado, con la esperanza de que esto estimulara a los bancos y a otros inversores a dar un uso más fructífero a su dinero, como la financiación de las empresas.

Con el endurecimiento cuantitativo, el BCE absorberá la liquidez creada por el QE deshaciéndose de sus tenencias de bonos.

Esto debería elevar el coste del dinero y enfriar el crédito y la inversión.

¿CÓMO SERÍA EN LA PRÁCTICA?

El BCE ha insinuado que no tiene previsto vender sus bonos, sino que simplemente dejará de sustituir algunos de los que venzan, como hizo la Reserva Federal de Estados Unidos cuando inició su propio programa de QT a principios de este año.

La Fed dijo que sólo reinvertirá los ingresos de los bonos que venzan que superen un determinado umbral mensual.

¿EL BCE SE LIMITARÁ A COPIAR A LA FED?

Probablemente no, ya que los reembolsos mensuales del Programa de Compra de Activos del BCE oscilan entre los 17.800 millones de euros del próximo agosto y los 52.700 millones de euros de octubre.

Eso significa que podría tener que utilizar un porcentaje de reembolsos como criterio o suavizar las reinversiones a lo largo de varios meses, como ha hecho en el pasado.

Pero los responsables de la política del BCE han insistido en que quieren que la QT sea predecible y gradual, así que no espere demasiadas variaciones.

La idea es ponerlo en piloto automático para que los responsables políticos no tengan que tomar decisiones periódicas sobre el ritmo de los reembolsos, asegurando que los tipos de interés seguirán siendo su herramienta clave.

¿DE CUÁNTO DINERO ESTAMOS HABLANDO?

El BCE ha comprado activos por valor de 3,3 billones de euros en el marco del APP, la mayoría de los cuales son bonos del Estado.

Éstos tienen un vencimiento medio de algo más de siete años y los analistas esperan que el BCE reduzca su cartera sólo entre 15.000 y 20.000 millones de euros al mes de media. Esto significa que el BCE tardará mucho tiempo en reducir su balance si no vende activos.

El BCE también cuenta con un Programa de Compras de Emergencia por separado, por valor de 1,7 billones de euros. Ha dicho que seguirá reinvirtiendo los ingresos de ese programa hasta finales de 2024.

¿QUÉ SIGNIFICA PARA LOS PRESTATARIOS?

El BCE ha sido un importante comprador de bonos del Estado desde 2015. Durante algunos meses, en el punto álgido de la pandemia, estuvo comprando más deuda soberana de la que emitían los países.

Esto va a cambiar con la QT, obligando a los gobiernos de la zona euro -la mayoría de los cuales siguen teniendo déficit- a conseguir dinero de los inversores privados.

UniCredit estima que el mercado necesitará absorber 500.000 millones de euros adicionales de bonos gubernamentales de la zona euro el próximo año, el mayor aumento desde 2010.

¿DEBEMOS ESPERAR UNA AGITACIÓN EN EL MERCADO?

Los mercados parecen haber descontado ya un poco de QT, con los rendimientos de los bonos del Estado en toda la zona euro subiendo a máximos de varios años en septiembre antes de un retroceso en las últimas semanas.

Los bonos alemanes a 10 años rinden actualmente un 1,8%, frente al 0,4% de hace un año, mientras que los bonos similares de la muy endeudada Italia se sitúan en el 3,7%.

Pero el BCE ya ha proporcionado una red de seguridad para estos países, en forma de un plan que le permitiría comprar cantidades ilimitadas de sus bonos si el mercado se agrieta.

(1 dólar = 0,9497 euros)