En su primera revisión de las políticas energéticas de Canadá desde 2015, la AIE dijo que el papel del país como gran productor, consumidor y exportador de energía presentaba "tanto retos como oportunidades" para alcanzar sus objetivos de descarbonización.
El gobierno liberal del primer ministro Justin Trudeau se ha comprometido a reducir la producción de carbono entre un 40% y un 45% por debajo de los niveles de 2005 para 2030 y alcanzar las emisiones netas cero para 2050. La energía representa el 10% del producto interior bruto de Canadá, y el petróleo y el gas son responsables del 26% de las emisiones de gases de efecto invernadero del país, lo que lo convierte en el sector de mayor emisión de la economía.
El director de la AIE, Fatih Birol, elogió los esfuerzos realizados hasta ahora por Canadá para reducir las emisiones de carbono, pero dijo que era necesario seguir trabajando.
"Canadá está definitivamente en la primera liga de todos los países productores de petróleo cuando se trata de abordar nuestro desafío climático", dijo Birol en una conferencia de prensa. "Queremos ver cómo se aplican esas estrategias".
Birol dijo que el mundo necesitará petróleo y gas incluso cuando se pretenda alcanzar las emisiones netas cero en 2050, y le gustaría que esa producción procediera de países fiables con planes para producirlo de la forma más limpia posible, destacando Canadá.
Sin embargo, los defensores del medio ambiente criticaron a la AIE por su incoherencia al exponer cómo puede Canadá reducir las emisiones de la producción de petróleo y gas para seguir exportando después de 2050.
"El mito de los combustibles fósiles ecológicos es persistente", dijo la analista de política climática, Mile Boisseau-Bouvier.
El ministro de Recursos Naturales, Jonathan Wilkinson, dijo que Canadá necesitaba reducir tanto la intensidad de las emisiones de su petróleo y gas como el consumo de combustibles fósiles.
Para acelerar la descarbonización del sector del petróleo y el gas, la AIE pidió que se tomen medidas enérgicas para frenar las emisiones de metano y acelerar el ritmo de innovación en tecnología energética.
Canadá ya está desarrollando tecnologías, como la captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCUS), el hidrógeno limpio y los reactores nucleares de módulo pequeño, y la AIE dijo que una mayor financiación federal para la investigación y el desarrollo ayudaría a acelerar el progreso.
Birol clasificó el CCUS como una de las tres tecnologías de descarbonización más críticas del mundo, de entre las cerca de 800 examinadas por la AIE.
Sonya Savage, ministra de Energía de Alberta, la principal provincia productora de petróleo de Canadá, dijo a Reuters que se alegraba de que la AIE reconociera que el consumo de petróleo y gas continuará, así como su importancia para la economía canadiense.
