Una iniciativa mundial para acelerar la adopción de vehículos eléctricos ha recibido un impulso financiero de 100 millones de dólares de la Fundación IKEA para ayudar a los países en desarrollo a prescindir de los vehículos de gasolina y pasar directamente a la alternativa más ecológica.

La Campaña Drive Electric, entre cuyos inversores benéficos también se encuentra la Fundación Europea del Clima, declaró que la última donación de fondos de la Fundación IKEA se utilizaría para ayudar a apoyar los esfuerzos de los grupos de presión y hacer campaña a favor de la transición hacia el VE en África, América Latina y el Sudeste Asiático, en el marco de una iniciativa que se denominará "Leapfrogging Partnership".

Se prevé que las economías emergentes del mundo acaparen la mayor parte del crecimiento de la demanda de automóviles, camiones, autobuses y vehículos de dos o tres ruedas para 2050, y la esperanza es que invertir ahora en estos países pueda ayudar a garantizar que el crecimiento sea totalmente eléctrico.

"El transporte por carretera representa aproximadamente el 15% de las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la energía, por lo que si nos tomamos en serio la transición global hacia los 1,5 grados de calentamiento global, no podremos reducir las emisiones sin él", declaró a Reuters Edgar van de Brug, director de cartera de la Fundación IKEA para la economía real.

La subvención, una de las mayores donaciones benéficas de la historia de la Fundación IKEA, apoyará a los socios locales que trabajan para hacer frente a los principales obstáculos a la expansión, como la limitada infraestructura de recarga y la falta de políticas favorables a los vehículos eléctricos, mientras tratan de crear mejores condiciones de mercado para desbloquear la financiación pública y privada, añadió.

Colectivamente, la subvención podría ayudar a ahorrar alrededor de 43 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2e) para 2050 en países como Brasil, México, Indonesia y Sudáfrica, dijo la Campaña Drive Electric.

La ampliación de la financiación se produce tras el éxito obtenido en otros países como la India, donde la electrificación del reparto de última milla para paquetes en zonas urbanas estaba "despegando a gran escala", afirmó van de Brug.

Además de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar el aire limpio, los VE también pueden beneficiar a la economía en general al acelerar el desarrollo de las baterías, abaratar los costes y mejorar la capacidad de almacenamiento, afirmó van de Brug.

"La electrificación del transporte por carretera es uno de los superpuntos de apoyo... que podría ayudar a reducir las emisiones en más de 10 sectores de nuestra economía", afirmó.

La Directora del Programa Drive Electric, Rebecca Fisher, dijo que los beneficios sociales más amplios de pasarse a la electricidad también eran notables.

"Sabemos que las comunidades ya están experimentando los beneficios de la e-movilidad, desde los conductores de reparto que ahorran dinero en combustible hasta los trabajadores del transporte público que respiran un aire más limpio... Ahora es el momento de sobrealimentar el impulso de la innovación en VE con una política pública ambiciosa, liderazgo empresarial y asociaciones sólidas." (Reportaje de Simon Jessop; Edición de Susan Fenton)