La resolución no vinculante, propuesta por Estados Unidos y copatrocinada por otras 122 naciones, tardó tres meses en negociarse y también aboga por reforzar las políticas de privacidad, dijeron los funcionarios, que informaron a los periodistas antes de la aprobación de la resolución.

"Navegamos en aguas agitadas con la tecnología en rápida evolución, lo que significa que es más importante que nunca dirigirnos a la luz de nuestros valores", dijo uno de los altos funcionarios de la administración, describiendo la resolución como el "primer documento de consenso verdaderamente global sobre la IA".

La resolución es la última de una serie de iniciativas -pocas de las cuales tienen fuerza- de gobiernos de todo el mundo para dar forma al desarrollo de la IA, entre temores de que pueda utilizarse para perturbar los procesos democráticos, turboalimentar el fraude o provocar dramáticas pérdidas de puestos de trabajo, entre otros perjuicios.

"El diseño, el desarrollo, el despliegue y el uso indebidos o malintencionados de sistemas de inteligencia artificial... plantean riesgos que podrían... socavar la protección, la promoción y el disfrute de los derechos humanos y las libertades fundamentales", dice la medida. Preguntados sobre si los negociadores se enfrentaron a la resistencia de Rusia o China - estados miembros de la ONU que también votaron a favor del documento - los funcionarios admitieron que hubo "muchas conversaciones acaloradas". ... Pero nos comprometimos activamente con China, Rusia, Cuba y otros países que a menudo no están de acuerdo con nosotros en algunas cuestiones."

"Creemos que la resolución logra el equilibrio adecuado entre fomentar el desarrollo y seguir protegiendo los derechos humanos", declaró uno de los funcionarios, que habló bajo condición de anonimato.

En noviembre, EE.UU., Gran Bretaña y más de una docena de otros países dieron a conocer el primer acuerdo internacional detallado sobre cómo mantener la inteligencia artificial a salvo de actores deshonestos, presionando para que las empresas creen sistemas de IA que sean "seguros por diseño".

Europa va por delante de Estados Unidos, ya que los legisladores de la UE adoptaron este mes un acuerdo provisional para supervisar la tecnología, acercándose así a la adopción de las primeras normas mundiales sobre inteligencia artificial. El gobierno de Biden ha estado presionando a los legisladores para que regulen la IA, pero un Congreso estadounidense polarizado ha avanzado poco.

La Casa Blanca trató de reducir los riesgos de la IA para los consumidores, los trabajadores y los grupos minoritarios al tiempo que reforzaba la seguridad nacional con una nueva orden ejecutiva en octubre.

Al igual que los gobiernos de todo el mundo, los funcionarios chinos y rusos están explorando con entusiasmo el uso de herramientas de IA para diversos fines. El mes pasado, Microsoft dijo que había descubierto a piratas informáticos de ambos países utilizando el software OpenAI, respaldado por Microsoft, para perfeccionar sus habilidades de espionaje.