La Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) acordó el domingo una serie de restricciones contra Malí, incluida la suspensión de las transacciones financieras, por el hecho de que las autoridades interinas no celebren elecciones democráticas el próximo mes, tal y como se acordó tras el golpe militar de 2020.

"El riesgo de que la situación en este país se deteriore es evidente", dijo Borrell a los periodistas tras una reunión de los ministros de Defensa de la UE en la ciudad occidental francesa de Brest.

Borrell dijo que la medida de la UE era también una respuesta a la llegada de contratistas militares privados del grupo ruso Wagner, cuyos miembros son en su mayoría ex militares.

Francia tiene miles de tropas que luchan contra los militantes islamistas en la región del Sahel y en diciembre se unió a otros 15 países, en su mayoría estados europeos que operan en Malí, para condenar la posible llegada de mercenarios.

En diciembre, los 27 países de la UE impusieron sanciones a Wagner y establecieron un nuevo régimen de sanciones para Malí con el fin de atacar a la junta.

"El nuevo régimen de sanciones fue acordado y estas discusiones continuarán ahora", dijo la ministra francesa de las Fuerzas Armadas, Florence Parly, en una conferencia de prensa junto a Borrell.

Funcionarios franceses han dicho que se están realizando consultas entre Francia y sus socios europeos sobre cómo responder y a quién sancionar. Es probable que las decisiones se tomen a finales de enero.

Alemania, que ha desplegado más de 1.000 soldados en Malí, dijo que examinaría si la misión militar estaba logrando sus objetivos, que incluyen la democratización del país.

"Cuando se nos dice que las elecciones se posponen cinco años, está claro que las cosas no van en la dirección correcta", declaró la ministra de Defensa alemana, Christine Lambrecht, añadiendo que esperaba más progresos y una solución a la cuestión del grupo Wagner si las tropas alemanas debían permanecer en Malí.