Rusesabagina, de 67 años, fue condenado a 25 años de prisión tras ser declarado culpable en septiembre de ocho cargos de terrorismo relacionados con las actividades de una organización opuesta al gobierno del presidente Paul Kagame.

Se negó a participar en su juicio, que fue denunciado por sus partidarios como una farsa por motivos políticos.

Los fiscales habían pedido una sentencia de cadena perpetua y anunciaron tras el juicio que apelarían.

No han dicho qué pretenden con la apelación, que también afecta a otros 20 acusados que fueron juzgados al mismo tiempo que Rusesabagina. Su familia ha dicho que los fiscales buscaban que su sentencia se convirtiera en cadena perpetua.

La vista de la apelación debía comenzar el lunes, pero Rusesabagina, que se encuentra en una prisión ruandesa, no compareció y el tribunal aplazó la vista para examinar si se le había notificado debidamente que se iba a celebrar.

"El tribunal considera que el hecho de que Paul Rusesabagina haya sido notificado por el jefe de la prisión, que tiene jurisdicción para ello, donde está detenido, demuestra que fue su decisión no asistir a la audiencia", dijo el juez Emmanuel Kamere el martes.

"El caso debe ser juzgado en su ausencia", dijo Kamere durante una breve audiencia procesal, añadiendo que la apelación seguiría adelante el jueves.

Rusesabagina negó todos los cargos en su contra. Su familia y sus partidarios dicen que su caso es un ejemplo del despiadado trato que Kagame da a los opositores políticos.

Ha reconocido tener un papel de liderazgo en el Movimiento Ruandés por el Cambio Democrático (MRCD), pero ha negado su responsabilidad en la violencia ejercida por su brazo armado, el Frente de Liberación Nacional (FLN). Los jueces del juicio dijeron que los dos grupos eran indistinguibles.

En la película de 2004, Rusesabagina aparecía arriesgando su vida para albergar a cientos de personas en el hotel que dirigía en la capital ruandesa, Kigali, durante los 100 días de genocidio, cuando los extremistas hutus mataron a más de 800.000 tutsis y hutus moderados.

La interpretación del actor Don Cheadle del gerente del hotel le valió una nominación al Oscar, mientras que el propio Rusesabagina fue galardonado con la Medalla de la Libertad por el presidente estadounidense George W. Bush en 2005.

Posteriormente, Rusesabagina utilizó su fama para poner de manifiesto lo que describió como abusos del gobierno de Kagame.

Kagame, que gobierna desde 1994, niega las acusaciones y ha contado con el apoyo de los donantes occidentales para restaurar la estabilidad e impulsar el crecimiento económico. Sin embargo, los grupos de derechos humanos describen el caso de Rusesabagina como parte de un patrón de intimidación a los opositores.