El plazo, que expiró el viernes, ha sido considerado poco realista por la industria minera desde que se fijó por primera vez a principios de 2019, un mes después del colapso de una presa de relaves en Brumadinho que mató a 270 personas.

Según el proyecto de acuerdo, alcanzado con la fiscalía del estado de Minas Gerais, la empresa también cumplirá una serie de obligaciones para eliminar todas sus presas de relaves río arriba.

La cifra que deberá pagar Vale se destinará a financiar proyectos destinados a la preservación del medio ambiente y a la mejora de las acciones del gobierno relacionadas con la seguridad de los diques de cola, según el documento.

La minera confirmó la firma del acuerdo y reiteró su compromiso de retirar las presas "en el menor tiempo posible, teniendo como prioridad absoluta la seguridad de las personas y el cuidado del medio ambiente".

También dijo que el acuerdo aporta "más seguridad jurídica y técnica al proceso de descaracterización de las 23 presas de la empresa aguas arriba en Minas Gerais".

El fiscal brasileño Carlos Eduardo Ferreira Pinto dijo a Reuters que el acuerdo no amplía el plazo ni concede una amnistía, sino que es un ajuste técnico y legal.

Vale dijo que eliminó siete estructuras desde 2019 y espera terminar 2022 con el 40% de sus presas río arriba eliminadas. Esto significa que 12 de sus 30 presas mapeadas habrán sido eliminadas a finales de este año.

(1 dólar = 5,15 reales)