La Organización Independiente de Normas de Prensa (IPSO) dictaminó que la columna contenía una referencia peyorativa y prejuiciosa al sexo de Meghan, en violación del Código de Prácticas de los Editores.

El artículo de opinión, publicado en diciembre de 2022 y retirado desde entonces por The Sun, suscitó la condena generalizada de miembros del público, políticos, los jefes de Clarkson e incluso su propia hija, después de que escribiera que odiaba a Meghan, la duquesa de Sussex, a un "nivel celular".

La columna se convirtió en el artículo más denunciado por IPSO, que dijo que generó más de 25.000 quejas de miembros del público.

Clarkson y el Sun, propiedad de News Corp, de Rupert Murdoch, pidieron disculpas, pero IPSO inició una investigación basada en las quejas de dos organizaciones benéficas de mujeres: la Sociedad Fawcett y la Fundación WILDE.

La IPSO ha dado instrucciones al Sun para que publique un resumen de las conclusiones en su contra -redactado por la IPSO- en la misma página en la que suele aparecer la columna, que se señalará en la portada del periódico en versión impresa y en el sitio web sun.co.uk.

"Encontramos que las imágenes empleadas por el columnista en este artículo eran humillantes y degradantes hacia la duquesa", dijo el presidente de IPSO, Edward Faulks.

IPSO no estimó otros elementos de la denuncia, según los cuales el artículo era inexacto, acosaba a Meghan e incluía referencias discriminatorias hacia ella por motivos de raza.

Harry y Meghan han sido objeto habitual de burlas en los tabloides británicos, sobre todo desde que se apartaron de sus funciones reales en 2020 y se trasladaron a California.

El príncipe ha demandado a MGN, la editora del Daily Mirror, Sunday Mirror y Sunday People, por acusaciones de pirateo telefónico que se remontan a 2011 y años anteriores. MGN dice que no hay pruebas de que el teléfono de Harry fuera pirateado.