Ghana, productora de oro, petróleo y cacao, se enfrenta a su peor crisis económica en una generación, provocada por la espiral de la deuda pública.
Las protestas callejeras por la subida de los precios el año pasado empujaron a las autoridades a pedir ayuda al Fondo Monetario Internacional, que acordó proporcionar un paquete de ayuda de 3.000 millones de dólares condicionado a la reestructuración de la deuda.
El Ministro de Finanzas Ken Ofori-Atta
dijo que
el domingo que la nación de África Occidental pretendía alcanzar un acuerdo de reestructuración con los acreedores bilaterales en las próximas semanas.