LONDRES, 4 oct (Reuters) - La economía de la eurozona probablemente se contrajo el trimestre pasado, según una encuesta que mostró que la demanda cayó en septiembre al ritmo más rápido en casi tres años, ya que los consumidores endeudados frenaron el gasto ante el aumento de los costes de los préstamos y la subida de los precios.

El Índice Compuesto de Gestores de Compras (PMI) de HCOB, elaborado por S&P Global y considerado un buen indicador de la salud económica general, subió a 47,2 puntos en septiembre, frente a los 46,7 de agosto.

Sin embargo, se situó por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción por cuarto mes consecutivo, aunque justo por delante de la estimación preliminar de 47,1.

La encuesta del miércoles mostró que la desaceleración era generalizada, ya que, al igual que en agosto, la producción disminuyó tanto en los servicios como en el sector manufacturero.

"El PMI compuesto HCOB de la eurozona repuntó un poco. Sin embargo, aún no podemos subirnos al tren de la esperanza. La culpa es de los nuevos pedidos, que están cayendo en picado, especialmente en Alemania y Francia", dijo Cyrus de la Rubia, economista jefe del Hamburg Commercial Bank.

El índice compuesto de nuevos pedidos de septiembre, que controla la demanda global, cayó a 44,4 desde 44,6, un mínimo no visto desde noviembre de 2020, cuando el mundo todavía estaba tratando de hacer frente a la pandemia del COVID-19.

El índice de gestores de compras (PMI), que cubre el sector de servicios dominante en el bloque, se mantuvo por debajo de 50 puntos por segundo mes consecutivo, pero subió a 48,7 desde 47,9. La estimación preliminar era de 48,4 puntos.

Ello se conoce después de que el lunes una encuesta similar mostrara que la actividad manufacturera siguió sumida en una profunda y generalizada recesión el mes pasado, ya que la demanda se contrajo a un ritmo pocas veces superado desde que se recopilaron los datos por primera vez en 1997.

Como dato positivo, las empresas de servicios aumentaron el mes pasado el número de empleados a un ritmo más rápido que en agosto. El índice de empleo subió de 50,4 a 51,5 puntos.

"Sigue habiendo una gran demanda de mano de obra en el sector servicios. De hecho, las empresas de la eurozona han reforzado sus equipos a un ritmo más rápido que en agosto. Es un dato interesante, teniendo en cuenta que los nuevos pedidos están de capa caída", añadió De la Rubia.

"Una hipótesis podría ser que, al agitarse las aguas económicas, la gente está volviendo a la búsqueda de empleo, lo que permite a las empresas cubrir carencias de personal de larga duración".

(Reporte de Jonathan Cable; editado en español por José Muñoz)