La lira turca alcanzó el jueves un nuevo mínimo histórico más allá de los 30 por dólar, tras perder más de un tercio de su valor el año pasado y más del 80% en los últimos cinco años, golpeada por una serie de recortes de los tipos de interés en el pasado frente a una inflación galopante.

La lira era un 0,2% más débil, a 30,01 a las 0845 GMT, tras tocar un mínimo histórico de 30,015. En lo que va de año ha perdido un 1,6%, incluso cuando los analistas afirman que sus perspectivas han mejorado debido a un giro de 180 grados de la política económica.

La divisa es "todavía (una) batalla clave para (el ministro de Finanzas Mehmet) Simsek et al, y (una) prueba del éxito de la estabilización", dijo Timothy Ash, estratega soberano senior de BlueBay Asset Management.

"(Sigue siendo) difícil anclar la lira con una inflación del 65%", añadió.

Desde que el presidente Tayyip Erdogan ganó la reelección en mayo, las autoridades han abandonado la poco ortodoxa política de bajos tipos de interés en favor de un fuerte endurecimiento de la política monetaria.

La tasa de inflación anual de Turquía subió al 64,77% en diciembre, manteniendo una tendencia al alza que se espera continúe en los próximos meses tras una gran subida del salario mínimo.

El jueves, el gobernador del Banco Central, Hafize Gaye Erkan, realizará presentaciones ante inversores extranjeros sobre política monetaria, inflación y activos turcos en Nueva York.

En junio, Erdogan nombró tanto a Simsek como a Erkan, que desde entonces ha subido los tipos en 3.400 puntos básicos hasta el 42,5% para frenar la inflación y reconstituir las reservas de divisas.

Antes del giro de 180 grados, los inversores extranjeros habían abandonado en gran medida Turquía, ya que Erdogan supervisaba una política de dinero fácil y reforzaba el control de las autoridades sobre los mercados de divisas, deuda y crédito, dejándolos en gran medida gestionados por el Estado.

La divisa, que ha sufrido una serie de desplomes desde 2018, se debilitó bruscamente el verano pasado cuando las autoridades aflojaron su control sobre ella. La depreciación se ralentizó en otoño, pero siguió siendo constante. (Reportaje de Daren Butler y Ece Toksabay; Edición de Jonathan Spicer y Mark Potter)