La propuesta, que buscaba un acuerdo con los minoristas para ofrecer productos frescos, incluidos el pescado, la carne y los huevos, a un precio fijo hasta enero, también se encontró con el escepticismo de otros grupos empresariales y de los políticos de la oposición, que consideran la medida como una regulación de precios.

La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que defendieron la idea, se reunieron el lunes con el sector para explicar la propuesta, que consideran "legal y basada en el principio de competencia".

Sin embargo, los minoristas aseguraron que ya contaban con muchos descuentos y que estaban haciendo "un esfuerzo extraordinario" para evitar repercutir en lo posible el aumento de los costes, como el de la energía, a los consumidores.

Las tres asociaciones empresariales presentes en la reunión representan a la mayoría del sector, con empresas como Carrefour, Alcampo, la marca Auchan en España, El Corte Inglés o Mercadona, la primera cadena de supermercados en España con una cuota de mercado del 25%.

"Si se intenta establecer un precio fijo para la cesta de la compra, se está tratando de distorsionar las relaciones entre las propias empresas de distribución y los proveedores", dijo a los periodistas tras la reunión el responsable de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), Javier Millán-Astray.

"Es inevitable que haya una subida, pero no se puede matar al mensajero", añadió.

Con una inflación anual del 10,3% en agosto, los españoles están cada vez más preocupados por el coste de la vida.

Según una reciente encuesta de la asociación de fabricantes y distribuidores AECAC, el 65% de los consumidores da más importancia al precio que a otros factores a la hora de comprar y el 63% busca descuentos.

En cambio, el sector sugiere que el gobierno reduzca el impuesto sobre el valor añadido de algunos productos.

"Hemos pedido al ministro Garzón que diga hoy qué productos alimentarios tienen que tributar al 21%, y cuáles deben hacerlo al 10% o al 4%", dijo Ignacio García-Magarzo, responsable de la asociación de supermercados ASEDAS.

La semana pasada, el minorista francés Carrefour dijo que ofrecería a los consumidores españoles una cesta de 30 productos básicos por 30 euros, pero eso fue antes de la propuesta del gobierno y no incluyó los productos frescos que la administración quiere en la lista.