NUEVA YORK, 18 abr (Reuters) - Los consumidores están empezando a retrasarse en los pagos de sus tarjetas de crédito y préstamos a medida que la economía se debilita, según ejecutivos de grandes bancos estadounidenses, que no obstante afirmaron que los niveles de morosidad seguían siendo moderados.

Los beneficios de gigantes del mercado crediticio como Bank of America Corp, JPMorgan Chase & Co, Wells Fargo & Co y Citigroup Inc superaron las previsiones de los analistas, al beneficiarse de la subida de los tipos de interés. Sin embargo, directivos del sector advirtieron de que esa fortaleza disminuiría este año ante la inminencia de una recesión y el aumento de la morosidad de los clientes.

"Hemos observado que algunas tendencias de la salud financiera de los consumidores se han debilitado gradualmente con respecto a hace un año", dijo el director financiero de Wells Fargo, Mike Santomassimo, en una conferencia telefónica celebrada el viernes para comentar sus resultados del primer trimestre.

Aunque la morosidad y las deudas incobrables netas --deudas con un banco que es poco probable que se recuperen-- han aumentado lentamente, como se esperaba, por lo general se mantiene la solidez de los consumidores y las empresas, afirmó el consejero delegado del banco, Charlie Scharf.

La empresa provisionó 1.200 millones de dólares en el primer trimestre para cubrir posibles préstamos dudosos.

Citigroup también realizó mayores provisiones para pérdidas crediticias, a pesar de que obtuvo más ingresos de los pagos de intereses de los clientes en las tarjetas de crédito.

Las tasas de morosidad aumentaron según lo previsto, pero se mantuvieron por debajo de los niveles normales en la cartera de préstamos de "muy alta calidad" del banco, dijo Mark Mason, jefe financiero del banco.

"Hemos endurecido las normas crediticias específicamente como resultado del actual entorno del mercado de tarjetas, seguimos calibrando nuestra concesión de créditos en función de lo que estamos viendo según las tendencias macroeconómicas", dijo Mason.

Las tasas de morosidad probablemente volverán a niveles "normales" del 3% al 3,5% para las tarjetas de marca y del 5% al 5,5% para los servicios minoristas a principios de 2024, dijo Mason. Las tasas de morosidad actuales son del 2,8% para las tarjetas de marca y del 4% para los servicios minoristas, según la presentación de resultados de Citi.

Bank of America provisionó 931 millones de dólares para pérdidas crediticias en el trimestre, cifra muy superior a los 30 millones de dólares del año anterior, pero inferior a la provisión de 1.100 millones de dólares del cuarto trimestre. Las deudas incobrables netas totales alcanzaron los 807 millones de dólares, cifra superior a la del trimestre anterior, pero aún por debajo de los niveles previos a la pandemia, dijo el banco en su comunicado de resultados.

"El consumidor está en buena forma en términos de calidad crediticia según cualquier criterio histórico. El empleo sigue siendo bueno, los salarios siguen siendo buenos y aún no hemos visto ninguna grieta en esa cartera", declaró a la prensa el director financiero de Bank of America, Alastair Borthwick.

Algunos de los clientes de JPMorgan estaban empezando a retrasarse en los pagos, pero los niveles de morosidad seguían siendo modestos, dijo Jeremy Barnum, jefe financiero del mayor banco estadounidense.

"No vemos muchas señales que indiquen un problema", dijo.

El banco duplicó con creces la cantidad que reservó para pérdidas crediticias en el primer trimestre con respecto al año anterior, hasta 2.300 millones de dólares, debido a unas deudas incobrables netas de 1.100 millones de dólares.

Según los analistas de UBS dirigidos por Erika Najarian, el empeoramiento de las condiciones económicas provocaría "un deterioro del crédito a lo largo de 2023 y 2024, con pérdidas que acabarían superando los niveles anteriores a la pandemia, dada la recesión que se avecina". Aun así, se prevé que los impagos de préstamos se mantengan "por debajo de los picos experimentados en anteriores recesiones", señalaron.

A medida que los bancos grandes y medianos se vuelvan más conservadores en la concesión de crédito, sus insolvencias netas probablemente alcanzarán su punto máximo en varios trimestres, escribió Betsy Graseck, analista de Morgan Stanley. "Esto significa un menor crecimiento de los préstamos" en 2023 y 2024, escribió.

(Reporte de Tatiana Bautzer; información adicional de Saeed Azhar; edición de Lananh Nguyen y Nick Zieminski; editado en español por Tomás Cobos)