El Tribunal Constitucional de Angola desestimó una demanda presentada por el segundo clasificado, el partido de la oposición UNITA, en las elecciones del 24 de agosto.

UNITA, un antiguo grupo rebelde que luchó contra el gobernante Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA) durante casi tres décadas, recibió muchos de sus votos de jóvenes que se sienten excluidos de las riquezas petroleras del país.

"Los ciudadanos no están con el MPLA. Queremos que se vayan", coreaban los manifestantes al unísono.

Muchos de ellos formaban parte de los jóvenes y desempleados que se sienten fracasados por el MPLA, algunos de cuyos miembros se hicieron multimillonarios con la riqueza petrolera de Angola mientras la mayoría vive en la pobreza.

Los manifestantes tomaron la Plaza de la Independencia, donde tradicionalmente el MPLA celebra mítines y fiestas de la victoria. Fueron pacíficos, aunque los analistas temen que haya suficiente rabia y frustración juvenil como para que las protestas se vuelvan rápidamente violentas.

El líder de UNITA, Adalberto Costa Junior, había convocado las protestas tras perder frente al actual presidente Joao Lourenco en las elecciones del 24 de agosto.

Los funcionarios de UNITA no han publicado ninguna prueba de sus afirmaciones de fraude electoral.

Algo más del 51% del electorado votó por el antiguo MPLA marxista, en un resultado contestado por la opositora Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), que obtuvo cerca del 44%, su mejor resultado hasta ahora.