GOMA, República Democrática del Congo, 31 ago (Reuters) - La cifra de muertos por la represión militar de las manifestaciones del miércoles contra Naciones Unidas al este del Congo es de al menos 40 personas, aproximadamente seis veces más que las siete bajas informadas inicialmente, dijeron el jueves dos fuentes militares.

El ejército del Congo reprimió violentamente una protesta en la ciudad de Goma contra la misión de paz de la ONU y otras organizaciones extranjeras, tras difundirse en las redes sociales imágenes de una agresión a un policía. Imágenes que Reuters no pudo verificar.

Las autoridades dijeron que un policía fue apedreado hasta la muerte y que seis manifestantes murieron cuando intervino el ejército.

Pero dos autoridades militares que hablaron bajo anonimato dijeron que los hospitales habían estado recibiendo docenas de camiones desde la protesta, y situaron la cifra de muertos por encima de los 40.

Una fuente de la ONU dijo que estaban investigando denuncias "creíbles" de más de cincuenta muertes después de que los soldados bloquearon el paso a los manifestantes, reunidos en una iglesia antes de que comenzara la manifestación.

El portavoz del ejército provincial, Guillaume Ndjike, desmintió las afirmaciones y dijo que el número de muertos seguía siendo de siete.

En redes sociales se han difundido imágenes no verificadas en las que se ve a soldados apilando cadáveres en un camión y conduciéndolos en caravana por Goma.

La directora de la filial local de la Cruz Roja Internacional en Goma, Anne-Sylvie Linder, dijo que la clínica había recibido un elevado número de personas con heridas graves de arma blanca y de bala tras la protesta.

El gobernador militar de la provincia de Kivu Norte, Constant Ndima, señaló que se había abierto una investigación.

La misión de paz de la ONU en el este del Congo, conocida como MONUSCO, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

La operación se ha enfrentado a protestas desde 2022, motivadas en parte por las quejas de no haber protegido a la población civil frente a décadas de violencia de las milicias.

(Reporte de Sonia Rolley y Erikas Mwisi Kambale; Editado por Sofía Díaz Pineda)