Egon Zehnder, la empresa de asesoramiento sobre liderazgo más importante del mundo, acaba de anunciar los resultados de un estudio en el que se ha encuestado a 972 directores ejecutivos de todo el mundo, y en el que se ha tomado el pulso a la evolución de las funciones y expectativas de estos ante los grandes retos mundiales y las nuevas tendencias. El estudio revela que la autorreflexión y el desarrollo personal han pasado a ocupar un lugar destacado entre las prioridades de los directores ejecutivos, que cada vez son más conscientes de sí mismos y se dan cuenta de que la clave de la prosperidad es mejorar el lado humano de su liderazgo.

A medida que las exigencias de igualdad en el lugar de trabajo y las nuevas presiones en torno al trabajo híbrido siguen dando forma a la cultura empresarial, los directores ejecutivos de todo el mundo se replantean su papel, la forma de relacionarse con su equipo y la manera de responsabilizar a su organización, y a ellos mismos, para que sus empresas estén preparadas para el futuro. Hoy en día, los directores ejecutivos consideran que dar prioridad a su propio desarrollo y aprovechar las fuentes intrínsecas de energía de las personas que forman parte de sus organizaciones es crucial para desenvolverse en entornos empresariales complejos.

Entre las principales conclusiones se encuentran:

  • El 90 % de los directores ejecutivos afirman que ahora se encuentran en el centro de voces cada vez más enérgicas, diversas y divergentes. Cuando se les preguntó por el impacto de las recientes circunstancias en su organización, la mayoría de los directores ejecutivos destacaron una aceleración en la toma de decisiones y los cambios, así como una mayor incertidumbre económica. Estos cambios ponen de manifiesto la complejidad y la rápida evolución que está cambiando los negocios, y que los directores ejecutivos tendrán que responder ante más partes interesadas y ser evaluados de formas nuevas y emergentes.
  • El 83 % de los líderes considera fundamental reflexionar sobre su propio estilo de liderazgo, frente al 66 % del estudio de 2018, The CEO: A Personal Reflection. Los directores ejecutivos están ampliando su capacidad de adaptación, relación y autoconocimiento. Se comprometen a escuchar diversas perspectivas y buscan cada vez más la retroalimentación de otras fuentes, como los miembros del equipo, los presidentes, los mentores, los consultores y otros directores ejecutivos. Además, las directoras ejecutivas son más propensas a recabar opiniones de una amplia gama de fuentes, y tienen mayor tendencia que sus homólogos masculinos a buscar la orientación de otros directores ejecutivos, mentores y miembros de la familia.
  • El 78 % de los directores ejecutivos están muy de acuerdo en que necesitan continuar su autotransformación, el triple que en 2018. Los directores ejecutivos también coinciden ampliamente en la importancia del «doble viaje», una senda en la que el líder cree que ver su desarrollo personal y el crecimiento de su organización como un viaje interrelacionado permitirá un cambio óptimo. Nuestro hallazgo más sorprendente es el acuerdo casi unánime entre un millar de líderes de que: «Como director ejecutivo, necesito tener capacidad de autotransformación, así como de transformar mi organización».
  • Dos tercios de los directores ejecutivos afirman que las métricas finales que dirigen sus decisiones han permanecido invariables, a pesar de las nuevas expectativas empresariales sociales y económicas a las que expresan su apoyo. Ante este conflicto, no está claro si los directores ejecutivos tienen un camino directo para cumplir sus ambiciones con las métricas financieras tradicionales como motor de decisión dominante para la mayoría de ellos.
  • Un análisis de las respuestas abiertas revela que casi 500 directores ejecutivos, más de la mitad de los encuestados, consideran que las capacidades relacionales son un punto ciego clave. En concreto, menos de la mitad de los directores ejecutivos (44 %) afirman sentirse plenamente alineados con sus equipos, y un número aún menor con sus consejos de administración, lo que apunta a un aumento de los niveles de tensión y a una mayor necesidad de colaboración.

«Los directores ejecutivos reconocen que las actuales complejidades empresariales sin precedentes exigen un cambio significativo en el liderazgo, y ese cambio debe empezar por mirar hacia dentro con nuevos niveles de autorreflexión y desarrollo personal. No se trata de mirarse el ombligo; es lo que nuestros equipos, organizaciones y partes interesadas esperan de nuestros directores ejecutivos», afirmó Jill Ader, presidenta mundial de Egon Zehnder. «Ahora, más que nunca, la perspicacia empresarial tradicional debe estar igualmente equilibrada con la empatía y la compasión para ganar el compromiso emocional de sus equipos y organizaciones, atravesar las complejidades empresariales y construir lugares de trabajo productivos e inspiradores».

Avanzar en estos entornos complejos exige que los directores ejecutivos aumenten su capacidad personal de adaptación, relación y autoconocimiento, destacaron Kati Najipoor-Schuette y Dick Patton, que codirigen el grupo de asesoramiento a directores ejecutivos de Egon Zehnder y son coautores de este estudio. Especialmente hoy en día, estas capacidades deben equilibrarse cada vez más con los puntos fuertes del liderazgo tradicional, la planificación estratégica y una implacable orientación al rendimiento. El dominio de estas habilidades requiere que los líderes aumenten su capacidad de escuchar, confíen en una red más amplia de interesados y se comuniquen con más autenticidad que nunca.

Como resultado de perfeccionar estas habilidades y de adoptar un enfoque del liderazgo más centrado en el ser humano, los directores ejecutivos desarrollarán la resiliencia, el liderazgo y la adaptabilidad de ellos mismos y de sus organizaciones.

Para obtener más información sobre el Estudio de directores ejecutivos de Egon Zehnder, en el que se encuestó a 972 directores ejecutivos de todo el mundo, visite www.egonzehnder.com/it-starts-with-the-CEO.

Acerca de Egon Zehnder

Egon Zehnder, la empresa de asesoramiento sobre liderazgo más importante del mundo, inspira a los líderes para que se enfrenten a cuestiones complejas con respuestas humanas. Con más de 55 años de experiencia en el asesoramiento a clientes sobre el liderazgo de directores ejecutivos, sabemos que la selección de un director ejecutivo es el punto medio de un proceso, no el final. Por eso, nos asociamos con nuestros clientes para ofrecer un apoyo integral y eficaz a la transición, sucesión, desarrollo e incorporación del director ejecutivo. Ayudamos a las organizaciones a llegar a la esencia de sus retos de liderazgo y ofrecemos información y conocimientos honestos para ayudar a los líderes a alcanzar su verdadero ser y propósito. Nuestros 525 consultores, repartidos en 63 oficinas y 37 países, son antiguos líderes sectoriales y funcionales que colaboran a la perfección en todas las geografías, sectores y funciones para ofrecer toda la potencia de la Firma a cada cliente, en todo momento. Estamos convencidos de que juntos podemos transformar a las personas, las organizaciones y el mundo a través del liderazgo.

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