La declaración se produce tras el llamamiento del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a una tregua durante el Ramadán, que comienza esta semana. El paramilitar RSF dijo que acogía con satisfacción el llamamiento al alto el fuego.

La declaración de Atta, emitida en el canal oficial del ejército en Telegram, citó los recientes avances militares del ejército en Omdurman, parte de la capital más amplia de Sudán.

Decía que no podía haber alto el fuego en Ramadán a menos que las Fuerzas Armadas Regionales cumplieran el compromiso contraído en mayo del año pasado en las conversaciones mantenidas en Yedda con mediación saudí y estadounidense de retirarse de las viviendas civiles y de las instalaciones públicas.

También dijo que no debería haber ningún papel para Mohamed Hamdan Dagalo, el líder del RSF conocido comúnmente como Hemedti, en la futura política o el ejército de Sudán.

La guerra entre el ejército de Sudán y el RSF estalló a mediados de abril de 2023 en medio de las tensiones por un plan de transición al gobierno civil. Las dos facciones dieron un golpe de estado en 2021 que hizo descarrilar una transición anterior tras el derrocamiento en 2019 del antiguo líder autocrático Omar al-Bashir.

El ejército ha estado en la retaguardia militarmente durante gran parte del conflicto. La RSF ocupó amplias zonas de la capital en los primeros días de combates.

La ONU afirma que casi 25 millones de personas -la mitad de la población de Sudán- necesitan ayuda, unos 8 millones han huido de sus hogares y el hambre va en aumento. Washington afirma que las partes enfrentadas han cometido crímenes de guerra.

El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, también ha instado a una tregua en Ramadán.

El embajador de Sudán ante la ONU dijo el jueves al consejo de seguridad de la ONU que el jefe del ejército y del consejo gobernante, Abdel Fattah al-Burhan, elogiaba el llamamiento de Guterres, pero se preguntaba cómo podría llevarse a cabo.

El ministerio de Asuntos Exteriores de Sudán, alineado con las fuerzas armadas, declaró que para que cualquier llamamiento al alto el fuego tuviera éxito, las RSF tendrían que retirarse de zonas como los estados de El Gezira y Sennar y varias ciudades de Darfur, bastión de las RSF.