Por si no lo había leído, el abuelo Biden tuvo que intervenir en este tenso clima social para tranquilizar a todo el mundo: "Estados Unidos no experimentará una recesión", declaró a principios de semana. Desde entonces, impulsado por unos resultados que, aunque no siempre han sido buenos, en cualquier caso han sido acogidos como tales (s/o Amazon), el mercado ha ganado otro 3% desde el lunes. Por lo tanto, los mercados parecen recuperarse un poco, fin de la cita.

"En la bolsa, como en el amor, pasar de un extremo a otro es más rápido de lo que se piensa" - Nuestras Estrellas Contrarias. La efímera euforia parece haber vuelto a los mercados en los últimos días. Amazon, por ejemplo, a pesar de perder cuota de mercado en la nube, crecer a un ritmo inferior al de la inflación y perder márgenes, ganó un 13,5% tras el cierre. Pero en el país del Tío Sam, aunque las cifras del gigante en el extranjero sean catastróficas -las ventas netas bajan un 12%-, mientras suba en Norteamérica (+10% interanual), subirá en bolsa. Afortunadamente, no todo el mundo tiene derecho a un trato tan favorable al otro lado del Atlántico. Meta Platforms también informó ayer. Con la caída de los márgenes de explotación del 43% al 29% en un año, el descenso de la facturación del 1% y la reducción a la mitad del FCF, la acción ha bajado un 5%.

Los resultados continuarán y jugarán un papel importante en la dirección del mercado en los próximos días. Esta tarde se publicarán los resultados de las petroleras Chevron y Exxon Mobil. A principios de la semana que viene le seguirán los resultados de S&P Global, Caterpillar, Starbucks, Paypal y AirBnB. Así, los toros podrían continuar su rebote, pero hay que tener cuidado de no despertar al oso dormido.

Dibujo de Amandine Victor para MarketScreener