AMAZON.COM, INC. Representa el primer gran esfuerzo de aplicación de la ley por parte del Fondo Amazonia, respaldado por cuatro naciones y gestionado por el BNDES, que acordó el mes pasado respaldar el proyecto diseñado por el Ministerio de Justicia y dirigido por la Policía Federal de Brasil.
El gobierno de Brasil ha reducido significativamente la deforestación este año en la Amazonia, que es vital para frenar el calentamiento global mediante la absorción de carbono, pero los madereros y mineros ilegales siguen amenazando la selva con impunidad.
Brasil también ha intensificado la cooperación internacional con sus vecinos sudamericanos para combatir la delincuencia en las vastas zonas fronterizas donde operan contrabandistas y narcotraficantes.
"Sin que todos tengamos el mismo propósito, estemos integrados, compartamos información e inteligencia y actuemos juntos para reforzar la lucha contra los delitos medioambientales, no avanzaremos", afirmó Humberto Freire, director de la Policía Federal para la Amazonia y los delitos medioambientales.
Freire, que asistirá a la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP28 en Dubai, dijo en una entrevista el martes que era hora de pasar de los discursos a las acciones en la Amazonia, lo que requiere financiación.
Los recursos iniciales del Fondo Amazonia se destinarán a la compra de helicópteros y otros equipos esenciales, al tiempo que se creará un Centro de Cooperación Policial Internacional en Manaos a principios del próximo año para servir de enlace con las autoridades de los países vecinos, dijo Freire.
El Fondo Amazonia hará el primer desembolso en los próximos días para el proyecto de aplicación de la ley presupuestado en 2.000 millones de reales para los próximos dos años, dijo.
Creado en 2008 para promover la preservación y el uso sostenible de la selva tropical, el Fondo Amazonia recibió donaciones iniciales de Noruega (1.200 millones de dólares) y Alemania (89 millones de dólares). La petrolera estatal Petrobras donó 7,7 millones de dólares. Suiza comprometió 5,6 millones de dólares y Estados Unidos 3 millones.
Desde que asumió el cargo en enero, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha cumplido su promesa de frenar la destrucción de la Amazonia bajo su predecesor de extrema derecha Jair Bolsonaro.
La deforestación se ha reducido aproximadamente a la mitad este año, hasta alcanzar la tasa más baja desde 2018, pero sigue siendo casi el doble de la registrada en 2012, y está lejos de la promesa de Lula de una deforestación cero para 2030. (Reportaje de Ricardo Brito y Anthony Boadle; Edición de Sandra Maler)
