BD (Becton, Dickinson and Company) ha presentado una jeringa prellenable de vidrio (PFS) de nueva generación que establece un nuevo estándar de rendimiento para las PFS de vacunas con nuevas y más estrictas especificaciones de procesabilidad, cosmética, contaminación e integridad. La nueva jeringa prellenable de vidrio BD EffivaxTM ha sido diseñada en colaboración con las principales empresas farmacéuticas para satisfacer las complejas y cambiantes necesidades de la fabricación de vacunas. Aproximadamente el 70% de las 100 principales empresas biofarmacéuticas confían en BD para el suministro de SFP.

La jeringa prellenable de vidrio BD EffivaxTM ayudará aún más a los clientes a satisfacer las estrictas demandas de la fabricación de vacunas de hoy en día a través de mejoras en el diseño centradas en el llenado/acabado y la fiabilidad del envase. Gracias a la mejora de las especificaciones de calidad, la BD EffivaxTM está diseñada para reducir el riesgo de parada de la línea y mejorar el coste total de propiedad,4 la capacidad de fabricación y la disponibilidad del suministro. La jeringa prellenable de vidrio BD Effivax™ se beneficiará de la inversión de 1.200 millones de dólares en cuatro años que BD anunció a finales de 2020 para ampliar y mejorar la capacidad de fabricación y la tecnología para las SFP. Mientras BD planifica el futuro de las vacunas, incluidas las de ARNm y las utilizadas para la COVID-19, la empresa sigue comprometida con el mantenimiento de una sólida capacidad para las SFP que ayude a reducir el tiempo y la mano de obra necesarios para la preparación de las vacunas con los formatos tradicionales de los viales.

Las jeringas precargadas (PFS) son una opción importante en el envasado y la administración de productos farmacéuticos inyectables, incluidas las vacunas, los productos biológicos y los anticoagulantes. Las SFP permiten la administración de un medicamento de dos maneras. En primer lugar, un SFP es un sistema de administración de fármacos diseñado para administrar la cantidad adecuada del medicamento al paciente de forma segura y fiable.

En segundo lugar, el envase del SFP ayuda a garantizar que no se produzcan efectos adversos en la calidad, la pureza o la potencia del fármaco durante toda su vida útil.