Los resultados trimestrales del grupo bancario tienden a confirmar la solidez de su modelo.
Como de costumbre, se ven empañados por una serie de partidas excepcionales, en particular la ganancia por la venta del Banco del Oeste y la financiación del programa de cobertura solicitado por el BCE.
Si se reexpresan, el beneficio "normalizado" es de 2.800 millones de euros, la mitad que en el primer trimestre del año pasado. No obstante, se recomienda prudencia, ya que la cifra comparable no es del todo objetiva, pues en aquel momento la economía aún se estaba recuperando del impacto de la pandemia.
Como era de esperar, el segmento de la banca de inversión - las actividades de fusiones y adquisiciones y de corretaje de primera clase, ambas muy apreciadas por los inversores institucionales europeos - está marcando los tiempos, mientras que el año pasado tiraba del carro.
Por otra parte, y a pesar de los temores generales sobre la situación económica, BNP sigue en modo "risk-on" en sus actividades de préstamo: el volumen de préstamos aumenta en los segmentos de particulares y empresas, apoyando así el crecimiento de los ingresos, mientras que la liberación de provisiones impulsa los beneficios consolidados.
Esta estrategia más agresiva es necesaria porque BNP sigue siendo menos sensible a las subidas de los tipos de interés que la mayoría de sus homólogos europeos, especialmente en España. Su modelo diversificado le protege en parte de los efectos cíclicos, pero también limita la exposición consolidada a los aumentos del margen de interés neto.
El mercado francés tampoco está acostumbrado a los tipos variables, y la popular cuenta de ahorro francesa "Livret A" sigue indexado a la inflación. Esto hace que la resistencia a la inflación sea más complicada para BNP, ya que su estructura de costes crece más deprisa que los ingresos procedentes de sus actividades de préstamo.
En cualquier caso, los accionistas apreciarán el talento del equipo directivo dirigido por Jean-Laurent Bonnafé. La filial Bank of the West se vendió justo antes del reciente colapso del sector bancario estadounidense. La operación recuerda en cierto modo a la muy premonitoria salida de BNP de Rusia tras la invasión de Crimea en 2014.
También celebramos la ampliación del ratio de capital de nivel uno, que ha mejorado significativamente -100 puntos básicos-, ya que ahora alcanza el 13,6%, un peldaño por encima de los objetivos iniciales.
El grupo sigue teniendo la intención de lograr una rentabilidad de los fondos propios de al menos el 12% en un plazo de dos años. Sin embargo, a x0,7 del valor de sus fondos propios tangibles, la capitalización bursátil actual refleja cierto escepticismo entre los inversores. Es cierto que resulta difícil imaginar una clase de activos menos popular entre ellos que los bancos europeos en general...
En este contexto, nos complace saber que los 15.000 millones de euros recuperados de la venta de BancWest se utilizarán para financiar recompras de acciones y reforzar el negocio de seguros.
BNP Paribas es el primer grupo bancario francés. El producto bancario neto (PNB) se desglosa por actividad de la siguiente manera - banca minorista (54%): actividad de banca minorista en Francia (24,1% del PNB), en Bélgica (14,6%) y en Italia (10,2%). El resto del NBP (51,1%) procede de las actividades internacionales y de las actividades de servicios financieros especializados (préstamos al consumo, crédito inmobiliario, crédito de leasing, gestión del parque automovilístico, leasing de equipos informáticos); - finanzas y banca de inversión (34,4%): actividades de consultoría y mercado de capitales (83,7% del PNB; consultoría sobre fusiones y adquisiciones, actividades relacionadas con los mercados bursátiles, de intereses y de divisas, etc.) y financiación (16,3%; financiación para adquisiciones, proyectos, transacciones de materias primas, etc.); - gestión institucional y privada y seguros (11,6%): gestión de activos, actividad de banca privada (nº 1 en Francia), servicios de corretaje inmobiliario y en línea, seguros y servicios de valores (nº 1 en Europa en valores retenidos). A finales de 2023, BNP Paribas gestionaba 988.500 millones de euros en depósitos corrientes y 859.200 millones de euros en préstamos corrientes. El producto bancario neto se distribuye geográficamente de la siguiente manera: Europa, Oriente Medio y África (82,9%), América (9,8%) y Asia/Pacífico (7,3%).