Qantas Airways anunció el miércoles que John Mullen se incorporará al consejo de administración de la compañía como presidente electo a partir del 1 de julio y sustituirá a su presidente saliente, Richard Goyder, antes de la asamblea general anual de la aerolínea de bandera australiana que se celebrará en octubre.

Mullen es actualmente presidente de Treasury Wine Estate, así como presidente independiente y no ejecutivo de la empresa de logística Brambles.

También formó parte del consejo de Telstra durante 15 años, antes de retirarse como presidente tras la asamblea anual de la gran empresa de telecomunicaciones el pasado octubre.

Treasury Wine y Brambles no respondieron inmediatamente a una petición de Reuters para que comentaran la situación del papel de Mullen en ambas empresas tras el nuevo nombramiento en Qantas.

La aerolínea con sede en Nueva Gales del Sur también nombró a Nora Scheinkestel directora no ejecutiva y presidenta del comité de remuneraciones de Qantas.

Los nombramientos, que se produjeron cuatro meses después de que Qantas dijera que Goyder dejaría el cargo a finales de 2024, forman parte de la renovación del consejo de la aerolínea para restaurar la confianza entre los inversores y arreglar su maltrecha reputación.

Goyder, que se convirtió en presidente en 2018, ha luchado previamente contra la presión para dimitir, incluida la de los pilotos de la aerolínea, diciendo que había seguido una ética elevada durante toda su carrera.

Alan Joyce, que fue consejero delegado de Qantas durante 15 años, se retiró a principios del pasado mes de septiembre tras una reacción pública en su contra. La aerolínea había dicho que la salida de Joyce ayudaría a "acelerar su renovación", dando la sensación de una compañía que se doblega ante la presión pública y política tras años de capearla.

La compañía se ha enfrentado a desafíos en los últimos tiempos, y el Tribunal Superior de Australia desestimó en septiembre su recurso contra una sentencia que consideraba que Qantas había recortado puestos de trabajo ilegalmente.

La sentencia se produjo días después de que el regulador australiano de la competencia demandara a la compañía por la venta de asientos falsos.

Qantas tiene previsto presentar sus resultados semestrales el 22 de febrero.