El grupo británico de lujo Burberry nombró el lunes al ex jefe de Michael Kors, Joshua Schulman, como nuevo consejero delegado, al tiempo que advertía sobre sus beneficios y suprimía el pago de dividendos para este año.

La ralentización del sector del lujo ha golpeado duramente a Burberry en el último año, haciendo descarrilar a la marca británica, de 168 años de antigüedad, en su intento de ascender en el mercado.

La empresa dijo que la debilidad de su mercado se había acentuado, empujando las ventas subyacentes a un descenso del 21% en las 13 semanas hasta el 29 de junio, y que por ello modificaría su oferta para que resultara "más familiar" a sus "clientes principales".

Ese declive llevó al consejo a decir que el consejero delegado, Jonathan Akeroyd, abandonaría la empresa con efecto inmediato y de mutuo acuerdo el lunes, poco más de dos años después de que asumiera el cargo.

Burberry, la mayor marca de lujo británica que se hizo un nombre vistiendo a las clases altas inglesas, dijo que si se mantienen las tendencias actuales su beneficio operativo para todo el año se situaría por debajo del consenso.

La decisión de volver a centrarse en su clásico estampado de cuadros camel, rojo y negro tras un coqueteo con los colores atrevidos empezaría a producir una mejora en su segunda mitad, dijo la empresa. (Reportaje de Sarah Young en Londres, Yadarisa Shabong en Bengaluru; Edición de Mrigank Dhaniwala y Kate Holton)