Diogo Mac Cord, secretario especial de privatizaciones del ministerio, dijo a Reuters que la postura de la Reserva Federal de domar la inflación reducirá la liquidez global y obligará a Brasil a ofrecer mayores rendimientos para atraer a los inversores.

Se espera que el Tribunal de Cuentas Federal (TCU) de Brasil dé su aprobación el miércoles por la tarde a la privatización más importante prevista por el gobierno del presidente Jair Bolsonaro.

Mac Cord dijo que el horario de verano del hemisferio norte podría reducir el apetito internacional por las acciones de Eletrobras que se han puesto a la venta en la privatización, pero destacó que las próximas decisiones de la Fed sobre las tasas son la principal preocupación del gobierno brasileño.

"Lo más preocupante es esta curva ascendente de los tipos de interés estadounidenses. Cada medio punto porcentual que suben drena mucho dinero, aprieta la liquidez. Así que la carrera contra el tiempo se debe a eso", dijo en una entrevista.

Es probable que la Fed suba su tipo de interés oficial en 50 puntos básicos en sus reuniones del 15 de junio y del 27 de julio.

La privatización de Eletrobras estaba prevista para mayo, pero se retrasó por el cuestionamiento del tribunal de cuentas del TCU sobre el valor potencial de la transacción.

Mac Cord asistió el martes a reuniones con el ministro de Economía, Paulo Guedes, y el nuevo ministro de Energía, Adolfo Sachsida, para discutir el acuerdo, que implica la flotación de acciones para diluir la participación mayoritaria del gobierno hasta el 45% o menos.

El director general de Eletrobras, Rodrigo Limp, dijo que la empresa podría ser privatizada en junio.

Mac Cord cree que Brasil también debería privatizar la petrolera estatal Petrobras mientras el producto aún tenga relevancia mundial, aunque dijo que su oficina aún no ha recibido instrucciones formales para estudiar tal operación.