Por Por Letícia Fucuchima

SAO PAULO, 14 nov (Reuters) - Eletrobras pretende usar su enorme cartera de centrales hidroeléctricas para atender los proyectos de descarbonización de grandes clientes, suministrando energía renovable para producir hidrógeno verde y "e-fuels" a costes muy competitivos, dijo a Reuters su vicepresidente de comercialización.

Con un parque de generación que supera los 44 gigavatios (GW) de potencia, Eletrobras tiene una ventaja competitiva para producir el combustible renovable porque ofrece energía "plana", es decir, sin las variaciones e intermitencias de la generación eólica y solar.

"Se puede tener energía eólica, energía solar, pero inevitablemente se llegará a la energía hidroeléctrica para 'aplanar' (estabilizar) esta curva (...) ¿Y quién es el dueño de la energía hidroeléctrica en Brasil? Eletrobras", dijo Ítalo Freitas en una conversación con Reuters.

La semana pasada, Eletrobras recibió la certificación del origen renovable del hidrógeno verde producido en su planta piloto instalada en la central hidroeléctrica de Itumbiara (MG/GO), la primera de su tipo en entrar en funcionamiento en Brasil, donde ya se han producido 3 toneladas del combustible desde 2021.

La empresa ya tiene mapeadas otras hidroeléctricas del grupo que podrían recibir proyectos de hidrógeno verde, dijo Freitas, sin entrar en detalles.

La mayor eléctrica de América Latina estudia cómo actuará en esta industria aún naciente, y ve oportunidades de ser socia en proyectos con otras empresas enfocadas en la producción de hidrógeno y "e-fuels" (derivados del hidrógeno), o proveedora de la energía renovable necesaria para el proceso.

El hidrógeno verde, que puede obtenerse mediante la electrólisis del agua utilizando energías renovables, se perfila como una importante vía para reducir las emisiones en sectores difíciles de descarbonizar, como el transporte y la siderurgia.

Su aplicación viene despertando el interés de grandes empresas que persiguen la transición energética y una producción más sostenible, como ArcelorMittal, Unigel y Petrobras.

El gobierno brasileño evalúa la posibilidad de conceder incentivos para estimular la nueva industria, medida vista como necesaria por el sector productivo para reducir costos y viabilizar proyectos multimillonarios, mientras el Congreso discute un marco regulatorio para el segmento.

(Por Letícia Fucuchima; Editado en español por Javier Leira)