Previamente, el martes, el Banco de la Reserva de Australia elevó su tipo de interés en 25 puntos básicos, hasta un máximo de 10 años del 3,1%, y reiteró que sería necesario un mayor endurecimiento de la política para contener la inflación.

Los cuatro principales prestamistas, el Commonwealth Bank of Australia, el National Australia Bank y el Australia and New Zealand Banking Group's subirán sus tipos a partir de finales de la próxima semana, mientras que la subida de Westpac Banking Corp se hará efectiva el 20 de diciembre, dijeron los bancos en declaraciones separadas.

Los prestamistas australianos han estado en sintonía con el banco central a la hora de subir los tipos en el actual ciclo de endurecimiento, uno de los más agresivos en décadas, ya que los bancos buscan apuntalar sus márgenes y beneficios en un mercado inmobiliario que se está enfriando.

Sin embargo, el aumento de los costes de los préstamos podría repercutir en la demanda de crédito, el mercado inmobiliario, el empleo y el crecimiento económico, lo que supondría un reto para los prestamistas.