Se espera que Anglo American plc (LSE:AAL) designe a un banco de inversión cualquier día para la venta de su cartera de activos mineros de carbón australianos por valor de 5.000 millones de dólares (7.500 millones de dólares australianos), según fuentes del mercado. La venta, que llega después de una anunciada ruptura de la empresa mientras ha estado esquivando los avances de BHP, implicará grandes dólares por lo que son algunas de las mejores minas de carbón metalúrgico del mundo. Eso puede limitar algo el campo.

Una de las partes más fuertemente posicionadas para la cartera es la propia BHP, pero quizá no quiera que se vea que está reforzando la estrategia de escisión de Anglo American que aumenta el valor de Anglo. Pero las fuentes dicen que BHP no se disputará las minas. Si la escisión de Anglo American no sale bien, siempre se ha considerado una posibilidad que BHP vuelva una segunda vez con una oferta "toda la empresa" por Anglo American al cabo de varios meses.

La apuesta de algunos es que la subasta de carbón atraiga ofertas no conformes. Yancoal Australia Ltd., respaldada por China. (ASX:YAL) pujará probablemente por los activos Capcoal y Dawson de Anglo American, mientras que Whitehaven Coal Limited (ASX:WHC), Coronado Global Resources Inc. (ASX:CRN) y Stanmore Resources Limited podrían pujar por las otras minas más atractivas, Moranbah North y Grosvenor. Otros activos que forman parte de la cartera de Queensland son el proyecto Aquila, una participación en Jellinbah y el potencial proyecto Moranbah Sur, que produce unos 16 millones de toneladas al año.

Glencore también sería lo suficientemente grande como para comprar las minas, pero el operador suizo aún debe completar su adquisición de Teck Resources, por lo que podría distraerse con ello. Aparte de eso, es difícil ver qué otros grupos estarían bien situados para comprar toda la cartera, con Whitehaven Coal ocupada digiriendo las minas de carbón que acaba de comprar a BHP. Se ha opinado que quizá la razón por la que BHP vendió sus minas de carbón de Daunia y Blackwater en primer lugar fue para dejar paso a los activos de Anglo American que heredaría como parte de su compra prevista, despejando así cualquier reto que pudiera plantearle la Comisión Australiana de la Competencia y el Consumidor por poseer ambas.

En cuanto a la selección de un banco de inversión, Anglo American ha utilizado a Goldman Sachs y Morgan Stanley como sus asesores de defensa, por lo que ambos podrían estar bien situados.