La tendencia pospandémica de la gente a dar prioridad a los viajes podría ser un cambio más permanente en los hábitos de gasto de los consumidores, afirmó el martes el jefe del mayor grupo hotelero irlandés, Dalata.

La empresa, que opera las marcas Maldron y Clayton y gestiona también 19 hoteles en el Reino Unido, registró un aumento interanual del 24% en el beneficio básico ajustado del primer semestre, hasta 103 millones de euros (111 millones de dólares), y afirmó que no veía signos de ralentización en la resurgente demanda de habitaciones.

"Ciertamente, 2, 3, 4 años antes de COVID la gente de 20 años habría priorizado los viajes y las experiencias sobre la compra de cosas. Esa tendencia ya se había iniciado y parece que ahora se ha extendido a la población en general", declaró a Reuters el consejero delegado Dermot Crowley en una entrevista telefónica.

"No hay duda de que gran parte de ello está relacionado con el post-COVID, pero cuanto más tiempo pasa, más piensas que en realidad podría tratarse de un cambio en los hábitos de viaje de la gente".

Crowley dijo que también parecía haber un cambio duradero en las reservas corporativas, en las que los viajeros hacen menos viajes pero se quedan más tiempo y en las que las grandes multinacionales irlandesas gastan mucho menos en viajes de negocios que antes del COVID.

Dalata dijo que se esperaba que sus ingresos por habitación disponible (RevPAR) en términos comparables -una medida clave del rendimiento de los ingresos de un hotel- fueran un 5% superiores en términos interanuales en los meses clave de julio y agosto, tras un aumento del 23% en el primer semestre.

El grupo, con sede en Dublín, dijo que disponía de 750 millones de euros para gastar en añadir más hoteles. Crowley dijo que Londres era su principal objetivo, habiendo abierto dos hoteles allí desde junio.

(1 dólar = 0,9248 euros) (Reportaje de Padraic Halpin Edición de Mark Potter)