DXC Technology presentó el jueves unos resultados trimestrales mejores de lo esperado, gracias a la fuerte demanda de sus soluciones en la nube por parte de los clientes que se decantan por la inteligencia artificial (IA).

Las operaciones de la industria de TI han experimentado un cambio masivo de los servicios tradicionales a los basados en la nube, ya que los clientes se decantan cada vez más por procesos de trabajo más ágiles, productivos y que tengan en cuenta los costes.

Además, DXC obtuvo importantes beneficios de su negocio digital y de sus asociaciones, lo que permitió a la empresa ampliar sus servicios de computación en nube.

Las empresas más pequeñas como DXC compiten con empresas de la talla de Accenture, IBM y AWS de Amazon por los servicios profesionales y de TI y los servicios de computación en nube.

Las acciones de DXC subieron un 1,4% en las operaciones después de la campana.

La empresa con sede en Tysons, Virginia, registró unos ingresos en el tercer trimestre de 3.400 millones de dólares, superando las expectativas de 3.360 millones, según datos de LSEG.

Los beneficios ajustados fueron de 87 céntimos por acción, por encima de las estimaciones de 77 céntimos por acción.

Aunque DXC tuvo un buen trimestre, la empresa de servicios informáticos ajustó sus previsiones anuales por tercera vez.

DXC espera obtener unos ingresos anuales de entre 13.630 y 13.670 millones de dólares, frente a su previsión anterior de entre 13.580 y 13.730 millones de dólares.

Se espera que los beneficios ajustados sean de entre 3 y 3,05 dólares por acción para 2024, frente a la horquilla anterior de entre 3,15 y 3,40 dólares.

Por separado, la empresa también nombró a Raúl Fernández como su Presidente y Director Ejecutivo, con efecto inmediato. Fernández había sido Presidente y Consejero Delegado interino de DXC desde diciembre de 2023.