La empresa finlandesa de servicios públicos dijo en mayo de 2022 que "perseguiría una salida controlada" del país, uniéndose a una larga lista de firmas que buscan salir después de que Rusia enviara tropas a Ucrania en febrero de 2022.

"Es probable que completar la salida lleve más tiempo y todavía hay incertidumbres significativas -incluidas las aprobaciones regulatorias- relacionadas con el proceso de desinversión en curso", dijo Fortum en febrero de 2023.

Kostin, en una entrevista emitida por el canal de televisión Rossiya-24, dijo que Rusia necesita atraer tanto dinero privado como sea posible y que podría ofrecer participaciones no mayoritarias en grandes empresas estatales a los inversores como parte de una campaña de privatización.

Kostin afirmó que Rusia debería considerar la posibilidad de hacerse con los activos de empresas extranjeras, un proceso que, según dijo, reflejaría las restricciones impuestas a los activos rusos en el extranjero.

El VTB se vio obligado a cerrar sus operaciones europeas cuando se impusieron las sanciones.

"Se nos dijo que (nuestra filial alemana) ya no tenía derecho a operar", dijo Kostin, explicando que la unidad fue puesta en administración, con sus activos para ser vendidos y cualquier cosa que quede congelada hasta que se eliminen las sanciones.

Kostin citó a Fortum como ejemplo de gran empresa extranjera cuyos activos podrían ser objeto de sanciones.

"¿Por qué no, digamos, absorberla? Dársela a alguna empresa gestora como Interrao", dijo Kostin. "Que la gestionen y paguen dinero al gobierno por ella.

"Y cuando acaben las sanciones, se la devolveremos. Es lo justo".