La Comisión, que supervisa la política de competencia en la Unión Europea de los 27, dijo que la fusión propuesta habría reducido la competencia en los servicios que facilitan los pagos con tarjeta en los comercios de Austria, Bélgica y Luxemburgo.

Las empresas acordaron desprenderse de algunos servicios de adquisición de comercios en el punto de venta (TPV) y de la provisión y gestión de terminales de TPV en los tres países para eliminar el solapamiento del mercado y responder a las preocupaciones de la Comisión.

El sector ha sido testigo de una oleada de fusiones y adquisiciones lideradas por rivales estadounidenses que buscan aumentar su cuota de transacciones digitales.

(1 dólar = 0,8539 euros)