(MT Newswires) -- Christos Megalou, CEO del Banco del Pireo (Piraeus Financial), considera la venta de la participación del Estado una señal de confianza y un éxito para el banco. Explica que el cambio de rumbo del banco es el resultado de un viaje de siete años y de una elaborada estrategia que abordó cuestiones clave y logró transacciones innovadoras, incluida la venta del primer paquete de exposiciones morosas en el mercado griego, la venta de la unidad de gestión de estas exposiciones, así como emisiones de deuda y capital. En 2021, el banco amplió capital y consiguió reducir sus exposiciones morosas del 54% a alrededor del 3%.

Megalou aspira a obtener un beneficio anual de 1.000 millones de euros en 2026, sobre la base de un plan de negocio muy detallado para los años 2024 a 2026. Este plan se basa en un sólido crecimiento de los ingresos, una perspectiva positiva de las comisiones, un estricto programa de reducción y disciplina de los gastos de explotación y una racionalización del coste del riesgo. Menciona que Grecia está produciendo menos nuevas exposiciones y préstamos morosos, lo que está mejorando el resultado neto.

El Banco del Pireo tuvo el mejor año de su historia en 2023 y Megalou espera que 2024 sea aún mejor. Ve una recuperación de las actividades de mercado, como las OPV y las fusiones y adquisiciones, y señala que la economía griega debería seguir creciendo por encima de la media europea. Ve un aumento de la inversión extranjera directa y de las transacciones de mercado entre entidades griegas, apoyadas por un crecimiento neto del crédito del 5% al 6% en los próximos años.

En cuanto a la inversión extranjera, los sectores de redes, digital y energías renovables son especialmente atractivos, con actividades destacadas en almacenamiento de energía, transición energética y sector farmacéutico. Megalou también destaca el importante papel de Grecia en el sector agroalimentario y su potencial para convertirse en un centro regional.

En cuanto a la política monetaria, Megalou espera que el BCE recorte los tipos de acuerdo con las previsiones de la curva a plazo. Espera un primer recorte en junio, seguido de dos o tres más de aquí a finales de año. Está en conversaciones con los reguladores sobre el reparto de dividendos para 2023, anticipando una decisión positiva que sería símbolo de la vuelta a la normalidad.

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