Ampere, la división eléctrica y de software de Renault, anunció el lunes que ampliaba su gama de baterías para incluir la tecnología LFP (fosfato de hierro y litio), que tiene una menor densidad energética pero es más asequible que la química NMC (níquel manganeso cobalto) utilizada actualmente por el grupo Renault.

Ampere ha firmado un contrato de cinco años para abastecerse en una planta de producción de la empresa coreana LG Energy Solution en Polonia, y también ha ampliado su suministro de LFP en la planta húngara de la empresa china CATL, sobre todo para el futuro Renault Twingo.

"Esta decisión es una respuesta eficaz e innovadora a la volatilidad del mercado y al cambio tecnológico", explica Ampere en un comunicado de prensa.

Las primeras entregas están previstas para 2026.

La industria automovilística en su conjunto se plantea actualmente cómo ampliar su gama de químicas de baterías para satisfacer las necesidades de todos los segmentos del mercado y hacer frente a la competencia que está surgiendo de los vehículos eléctricos (VE) chinos ultracompetitivos.

El fabricante de baterías Automotive Cells Company (ACC), una empresa conjunta de Stellantis y Mercedes, ha suspendido sus planes de construir gigafábricas de baterías en Alemania e Italia, en un contexto de ralentización de la demanda de VE y de apuesta por tecnologías más baratas que la NMC. (Informa Gilles Guillaume, editado por Kate Entringer)