Alemania ha firmado acuerdos con Italia, España y Suecia para el desarrollo de un sucesor del carro de combate Leopard 2, según informó el miércoles el diario económico alemán Handelsblatt.

De confirmarse, el acuerdo disgustaría sin duda a Francia, que en 2017 acordó con Berlín desarrollar un tanque conjunto franco-alemán que sucediera al Leopard 2 alemán y al Leclerc francés en un proyecto plagado de retrasos y desacuerdos.

La iniciativa se llevará a cabo bajo la dirección de Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall, los fabricantes de armas alemanes que construyen el Leopard 2, informó Handelsblatt, citando fuentes industriales y políticas no identificadas.

El Ministerio de Defensa alemán no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios. Un portavoz de Rheinmetall declinó hacer comentarios sobre el informe. Un portavoz de KMW no pudo hacer comentarios de inmediato.

El periódico afirmaba que los socios del acuerdo tenían previsto solicitar financiación al Fondo Europeo de Defensa por un importe de tres millones de euros, y añadía que en el proyecto también participarían la sueca Saab y la italiana Leonardo. No identificó qué empresa española participaría.

Los retrasos del proyecto franco-alemán propuesto han tensado unos lazos ya puestos a prueba por las diferencias sobre temas energéticos y la cuestión de hasta qué punto Europa debe independizarse de EE.UU. en su política de seguridad.

Aún así, los ministros de defensa de Francia y Alemania dijeron en julio que querían dar un nuevo impulso a la empresa y habían encargado a sus jefes de ejército que perfilaran las líneas generales de las capacidades del nuevo tanque, para tener listo un documento básico a finales de año.

Sin embargo, Handelsblatt informó de que los países no habían sido capaces de ponerse de acuerdo sobre las especificaciones del tanque, ya que Francia aspiraba a un vehículo más bien ligero mientras que Alemania optaba por un tanque más fuertemente blindado.

El ejército francés ha estado tradicionalmente muy implicado en África, donde tiene sentido disponer de un vehículo más ligero que pueda transportarse más fácilmente por aire. Alemania, en cambio, considera que la principal amenaza procede de Rusia.

El ministerio de Defensa de París y la oficina del presidente Emmanuel Macron no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.

Handelsblatt dijo que el nuevo acuerdo sobre tanques era un revés para la cooperación franco-alemana en materia de adquisiciones de defensa, aunque era posible que ambos proyectos continuaran.

Citaba fuentes del gobierno francés según las cuales el tema se plantearía en las consultas gubernamentales franco-alemanas previstas para principios de octubre. (Redacción de Friederike Heine, Sabine Siebold y Michel Rose, Edición de Andrew Cawthorne y Alison Williams)