"Lamentamos profundamente que se haya producido un ciberataque bajo nuestra vigilancia", dijo la empresa en la nota.

"Sabemos que esto es devastador y que tendremos que trabajar duro para recuperar su confianza", añadió.

La nueva página del sitio web de la empresa ofrecía ayuda a los clientes cuyos datos hayan sido violados, incluyendo cómo reemplazar los números de los permisos de conducir, pasaportes y tarjetas sanitarias.

La empresa ha aceptado pagar el coste de la sustitución de los pasaportes de los clientes comprometidos, según declaró el viernes el primer ministro Anthony Albanese.

"Nos pondremos en contacto con los clientes que hayan visto expuesto su número de documento de pasaporte", dijo Optus en su página web.

La policía australiana informó el viernes de que había puesto en marcha una operación para reforzar la protección de más de 10.000 clientes de Optus cuyas credenciales de identidad habían sido compartidas en Internet debido a la filtración de datos.

Las autoridades se han negado a comentar su investigación y sus esfuerzos por encontrar al pirata informático desde que el gigante de las telecomunicaciones informara por primera vez el 22 de septiembre del robo de los datos de hasta 10 millones de cuentas, equivalentes al 40% de la población australiana.