Así lo afirmaron dos fuentes cercanas a la situación.

La filial italiana de Edf dijo recientemente que estaba evaluando varias opciones relacionadas con los activos de almacenamiento, y añadió que sus tres emplazamientos tendrían un valor superior a los 500 millones de euros.

El mes pasado, Edison eligió a Lazard e Intesa Sanpaolo como consultores para el futuro de sus actividades de almacenamiento, según las fuentes.

Snam, que ya explota la mayor parte de las instalaciones de almacenamiento de gas de Italia, manifestó recientemente su interés por las instalaciones de Edison, geográficamente próximas a algunos de sus depósitos actuales.

La crisis energética desencadenada por la invasión rusa de Ucrania el año pasado demostró cómo las grandes instalaciones de almacenamiento de gas permiten a un país constituir una reserva de energía para hacer frente a posibles picos de consumo durante el invierno.

El negocio de almacenamiento de gas de Edison registró un beneficio "básico" de unos 50 millones de euros el año pasado. Según las fuentes, el negocio cuenta con un capital invertido reconocido (Rab, Regulated Asset Base) de unos 500 millones de euros.

Otros inversores potenciales podrían ser algunos fondos de infraestructuras y operadores industriales, según las fuentes.

(Traducido por Chiara Scarciglia, edición de Gianluca Semeraro)