SoftBank informó este mes de una pérdida récord en su unidad Vision Fund a medida que las valoraciones tecnológicas se desplomaban, y su fundador y consejero delegado, Masayoshi Son, prometió frenar la actividad inversora y preservar el efectivo.

En un esfuerzo por recaudar efectivo, SoftBank espera cotizar en bolsa el diseñador de chips Arm después de que un acuerdo para vender el negocio a Nvidia se viniera abajo tras chocar con los obstáculos regulatorios.

Moody's dijo que el colapso del acuerdo "muestra los desafíos en torno a la rápida realización del valor total de tales participaciones" y añadió que el intento de SoftBank de cotizar Arm "se enfrenta a un riesgo de ejecución en el momento y la valoración".

SoftBank pidió a Moody's que retirara sus calificaciones en 2020. El conglomerado dijo que la última evaluación "se basa en sus suposiciones e hipótesis subjetivas sin ninguna base razonable de apoyo".

La empresa ha hecho hincapié en su margen de maniobra financiera, afirmando que su relación préstamo-valor era del 20,4% a finales de marzo, lo que supone una mejora respecto a tres meses antes.

Moody's dijo que, a diferencia de SoftBank, incluye un préstamo de 8.000 millones de dólares garantizado contra la participación de Arm en su medida del apalancamiento del grupo.

"No está claro si (SoftBank) reducirá de forma sostenible su apalancamiento", dijo Moody's.